El Fondo Monetario Internacional (FMI) aceptó el pago que hizo Argentina en yuanes de los vencimientos de este mes y expresó que los equipos de la Argentina y el organismo "están trabajando intensamente" para alcanzar un entendimiento entre las partes para reformular el programa y completar la quinta revisión del mismo. "Nuestros equipos siguen trabajando intensamente con Argentina para ayudarlos a hacer progresos en la quinta revisión y enfrentar una situación muy compleja", afirmó la vocera del organismo, Julie Koszack, en conferencia de prensa. Así, el ministro de Economía, Sergio Massa, busca conseguir un nuevo acuerdo de metas para renegociar la deuda de 44.500 millones de dólares que tomó el gobierno de Mauricio Macri.
Así puntualizó este jueves que "el foco de estas discusiones son alternativas para fortalecer el programa de las autoridades mientras se reconoce el impacto de la sequía en la economía, y esto incluye discusiones de políticas para salvaguardar la estabilidad, fortalecer la acumulación de reservas, mejorar la sustentamiento fiscal y salvaguardar a los más vulnerables".
Las negociaciones se realizan contrarreloj ya que se estima que normalmente son necesarias dos semanas desde el momento en que se llega a un acuerdo a nivel técnico y su tratamiento en el Directorio del Fondo para su aprobación definitiva. La reformulación del programa argentino debería lograrse antes de agosto, cuando el Fondo entra en el receso del verano del hemisferio norte.
Pago con yuanes
El Fondo confirmó, además, que acepta que Argentina continúe pagando los vencimientos con los yuanes que le aporta China. Así lo sostuvo en su conferencia Kozack, quien confirmó que el FMI dio luz verde para que Argentina cumpla con los vencimientos previstos pagando en yuanes. La vocera sostuvo que Argentina pagó una parte del vencimiento del mes pasado en la moneda china. De los USD 2700 millones que vencieron en junio, 1100 se cancelaron el yuanes. "El uso de esta moneda está permitido por el FMI", indicó.
Esta mañana la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, aseguró que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) "se va a demorar lo que se tenga que demorar, para que estén preservados los intereses de la Argentina". También sostuvo que los datos de las consultoras y "algunas provincias" sobre la inflación "nos permiten pensar que estamos en un sendero de descenso" y relativizó un presunto desacople respecto de otros países que "tuvieron índices que subieron el triple y ahora están bajando, como están bajando en la Argentina".
La vocera minimizó las subas en la cotización del dólar en el mercado informal y dijo que "el equipo económico está monitoreando la situación". En su habitual conferencia de prensa semanal en la Casa Rosada, Cerruti afirmó esta mañana que "lo que dilata las negociaciones" con el Fondo Monetario Internacional "es la defensa del Gobierno argentino" de lo que considera "lo que es mejor para la Argentina", e insistió con que, lo que se busca, es "un acuerdo que no afecte el crecimiento y la distribución".
"El equipo de Ministerio de Economía continúa con las negociaciones con el FMI, tratando que el organismo entienda las especiales características de la región y el país en particular", expresó Cerruti en referencia tanto a los efectos de la sequía como a "la deuda que contrajo el gobierno de Mauricio Macri y este gobierno tiene que ir tratando de ver cómo convivir con esa pesada herencia".
En cuanto al viaje de una misión de Economía a la ciudad de Washington para cerrar un entendimiento con el FMI, Cerruti no dio precisiones sobre una fecha para su realización y subrayó que el acuerdo "se va a demorar lo que se tenga que demorar, para que estén preservados los intereses de la Argentina".
En otro orden, anticipándose a la difusión del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de junio que hará esta tarde el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), destacó que, en función de lo que informaron "algunas consultoras y algunas provincias", se estaría "frente a una tendencia a la baja, un número bastante más bajo" que el 7,8% de mayo.
Si bien el ministro de Economía, Sergio Massa, sostuvo que el acuerdo "está cerquita", el as bajo la manga del equipo económico viene desde China, quien se ofreció a destrabar el segundo tramo del swap si el organismo sigue sin hacer el desembolso que espera la Argentina.
El ultimo pago al FMI se realizó en parte con yuanes provenientes del swap acordado con China. La medida no solo permitió cumplir con el compromiso sino que también es una amenaza velada a la preponderancia del dólar dentro del organismo y su rol de prestamista de última instancia para la Argentina.
La renovación del swap por el equivalente a 10.000 millones de dólares, en dos tramos, permitió esta operación. Pero incluso el acuerdo fue más allá. El director representante por China ante el FMI, Zhengxim Zhang, comunicó al board a través de una nota interna que si el Fondo sigue demorando la aprobación del acuerdo, China autorizará a la Argentina a usar el segundo tramo (por los otros 5000 millones de dólares) del swap para abonar todos los vencimientos con el organismo.
La Argentina cuenta con un swap de monedas con China por 130.000 millones de yuanes, lo que equivale a unos 19.000 millones de dólares. Este swap representa actualmente el 60 por ciento de las reservas brutas en poder del Banco Central, de los cuales el equivalente a 5000 millones de dólares podría ser utilizados para afrontar los compromisos con el FMI.