El 55% de los argentinos está a favor de la regulación estatal de los alquileres e incluso entre los votantes del presidente Javier Milei es mayoría la opción de intervención pública. La consultora Sentimientos Públicos realizó un informe sobre el alquiler de la vivienda y una porción pequeña de los encuestados optaron por la desregulación del mercado.
Esta encuesta nacional "intenta comprender cuál es la situación real de los argentinos frente al problema de los alquileres, teniendo en cuenta también a los propietarios y a aquellas categorías menos visibles pero fundamentales: las personas que se ven obligadas a compartir una vivienda familiar", comenzó el informe. Entre las conclusiones, se destacó que el 55% del total de la población encuestada se manifestó en favor de la regulación estatal de los alquileres. Tan solo un 34% lo hizo en favor de la autorregulación del mercado.
El 62% de los inquilinos y casi el 49% de los propietarios optó por la regulación del mercado de alquileres por parte del Estado. Incluso entre quienes votaron por Milei, el 42% está a favor de la regulación del mercado de alquileres por parte del Estado contra el 41% que sostiene que debe hacerlo el propio mercado. Entre quienes votaron a Sergio Massa la proporción es 77% contra 10%.
Los jóvenes están a favor de la regulación
Más de la mitad de los jóvenes se manifiestan a favor de la intervención estatal en el mercado de alquileres. Las personas entre 26 y 55 años son las más inclinadas por esta opción, con porcentajes que oscilan entre el 55% y más del 60%.
Los inquilinos son aproximadamente un 20% de la población, con cifras similares en los distintos extractos sociales. Menos del 10% de los inquilinos desea permanecer siendo inquilino. El 50% de los inquilinos son hijos de inquilinos. Esto "multiplica las dificultades para acceder a una garantía y es una barrera para la movilidad social ascendente", remarcó el documento. El 49,5% de los encuestados encontró su hogar en alquiler a través de familiares, amigos o conocidos. Los sectores más bajos dependen más de estas redes de solidaridad.
Sólo el 60% de los inquilinos tienen contrato de alquiler escrito y firmado, lo que habla de un mercado con un 40% de informalidad. Aún en los sectores altos, la informalidad llega al 25%.
Un 77% de los que comparten vivienda tienen entre 16 y 40 años. Se trata de una población joven, a la que le cuesta incluso ser inquilina. Según el relevamiento, estos inquilinos latentes pertenecen mayoritariamente a los sectores medios y bajos.
Solamente un 9,3% de las personas con nivel socioeconómico alto vive con su familia, mientras que trepa al 28,5% en el nivel medio y al 40% en el bajo. El 63% de la población de nivel socioeconómico alto es propietaria; 45% para el nivel socioeconómico medio; y 26% en el nivel socioeconómico bajo. El promedio general de propietarios es del 42,5%.
Sólo un 10% de los propietarios (que son un 42,5% del total) posee más de una vivienda. De estas viviendas extra, sólo el 45% contribuyen al mercado de las viviendas.