La diputada del Frente de Todos Fernanda Vallejos mantuvo un debate virtual con su par de Juntos por el Cambio Luciano Laspina sobre la relación entre crecimiento y distribución. Lo hicieron en una charla organizada por el Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (Ceso).
Ambos coincidieron en la necesidad de reducir la pobreza, pero Vallejos la relacionó con el avance de la desigualdad en los últimos cinco años. En cambio, Laspina se enfocó en describir cómo elaborar un plan de estabilización para combatir la estanflación.
Por su parte, la diputada remarcó que es necesario aplicar políticas de mejora distributiva orientadas a generar mayor consumo popular para traccionar la actividad y, por lo tanto, también favorecer el empleo y la inversión.
“Distribuir para recomponer la calidad de vida y la capacidad de compra de los trabajadores y trabajadoras, empezando por los desocupados, los informales y los pasivos, no es sólo una incuestionable necesidad de justicia social, es también una política de pura racionalidad económica", sostuvo la economista.
Como ejemplos, la diputada contrapuso las experiencias de los gobiernos kirchneristas y macrista. En el primer caso, soslayó que se apuntó estimular la demanda a través de la suba real de las jubilaciones, mejorar los salarios de los trabajadores activos; ampliar los derechos sociales (AUH y AUE); aplicar políticas de salario indirecto.
De la mano con estas políticas, en materia de evolución de la distribución, la brecha de ingresos entre el 10% más rico y el 10% más pobre, medida por ingreso per cápita familiar, se achicó un 27% entre el segundo trimestre de 2010 y mismo periodo del 2015. En el mismo lapso (2010-2015), el PBI creció un 7,6%.
Como contracara, durante el gobierno macrista, aumentó la desigualdad a la par de la caída del PBI. Este último cayó un 3,95%, mientras que la brecha de ingresos entre el 10% más rico y el 10% más pobre creció 25%, de 16 a 20 veces. Y desde entonces, al segundo trimestre de 2020 había crecido otro 25%, de 20 a 25 veces.
Las políticas del macrismo, además, provocaron “la caída de la inversión en un 15%, contra un crecimiento de la inversión inducida por la expansión de la demanda y la actividad, de casi 7,7% entre 2010 y 2015”, precisó Vallejos.
A su turno, Laspina se enfocó en describir cómo elaborar un plan de estabilización para combatir la estanflación que, según su visión, remonta su comienzo a 2010. “El aumento del gasto social no es condición suficiente para reducir la pobreza”, señaló, aunque no relacionó la pobreza con la desigualdad.
Asimismo, el legislador agregó que “la estanflación del kirchnerismo arrancó allá por el año 2010, donde empieza una suerte de stop and go, y ni hablar del 2011 en adelante”. Según datos del Indec, el PBI creció en 2010 (10,1%), 2011 (6%), 2013 (2,4%) y 2015 (2,7%); y cayó en 2012 (1%) y 2014 (2,5%).
“Solo subiendo el gasto público un poco más para que aparezcan las inversiones, no funciona, porque esa estanflación y ese estancamiento del PBI per cápita coincide con una etapa de enorme gasto público y también de las políticas sociales. Esa receta no vale”, remarcó el dirigente del Juntos por el Cambio.
Hacia el final, Vallejos retomó el llamado a construir consensos básicos en materia de debate económico que había propuesto antes Laspina. En particular, con relación a que el gran problema a resolver para sostener el crecimiento en Argentina es la restricción externa.