A pesar de que los indicadores comienzan a mostrar signos de una recuperación sostenida mes tras mes, el tsunami de la pandemia hizo estragos en una estructura de trabajo, especialmente en la juventud. Por eso, el Gobierno apunta su mira hacia la recuperación de 2021 a través de una serie de estímulos para los sectores populares.
De acuerdo al último informe disponible del Indec respecto a la tasa de empleo, el grupo de varones de hasta 29 años el que mostró el descenso más pronunciado, al pasar del 44,3% en el primer trimestre al 30,8% en el segundo (-13,5 p.p.). La tasa de desocupación, por su parte, se incrementó en todos los grupos de sexo y edad, pero destaca el aumento en las mujeres de hasta 29 años, para las que crece en 4,6 puntos porcentuales, al pasar del 23,9% en el primer trimestre de 2020 al 28,5% en el segundo trimestre.
Ante semejante panorama, el Ministerio de Desarrollo Social ya puso en marcha el plan Potenciar Inclusión Joven, destinado a jóvenes de 18 a 29 años, que consiste en una ayuda de $ 8.500 a quienes presenten un proyecto productivo o social. El esquema busca elaborar mecanismos comunitarios para el acompañamiento a personas en situación de vulnerabilidad y facilitarle recursos que garanticen sus derechos.
A través de distintos convenios celebrados con municipios, provincias e instituciones de la sociedad civil involucradas, esta herramienta apunta al "financiamiento de proyectos socioproductivos, sociolaborales y sociocomunitarios", apuntaron desde el Ministerio de Desarrollo Social. La remuneración se entregará durante 12 meses.
Los jóvenes que se inscriban contarán con una asignación mensual de recursos para la inclusión joven de manera directa e individualizada. A través de la creación de espacios, también se planificará el financiamiento de distintos proyectos a partir de diagnósticos y estrategias ajustadas a la realidad local.
Desde la cartera que conduce Daniel Arroyo señalaron que las metas del programa serán "impulsar la participación de les jóvenes en actividades educativas, formativas, sociales, culturales y recreativa y generar instancias de participación para les jóvenes en el desarrollo de sus comunidades"
¿Qué tipo de proyectos financia?
-Proyectos de tipo socio productivos: emprendimientos con posibilidad de desarrollarse a partir del trabajo de sus propios miembros, en carácter asociativo.
-Proyectos de tipo socio comunitarios: iniciativas de desarrollo territorial que pueden incluir instancias socioeducativas y de formación, de recreación y de acceso a los bienes culturales por parte de la comunidad sobre la que operan.
-Proyectos de tipo socio laborales: espacios asociativos orientados a las capacitaciones de formación para el trabajo.
Impulsar la economía popular
Lanzado a mediados de este año, el Registro Nacional de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (ReNaTEP), que depende del Ministerio de Desarrollo Social, ya tiene 1.025.285 personas inscriptas, de las cuales el 57% son mujeres y el 43% hombres.
El Registro busca reconocer, formalizar y garantizar los derechos de los trabajadores de la economía popular para que accedan a herramientas que potencien su trabajo. Ser parte les permite sumarse a capacitaciones, participar de redes de comercialización, y obtener instrumentos crediticios y de inclusión financiera.
De acuerdo a las últimas estimaciones realizadas por Observatorio de Coyuntura Económica y Políticas Públicas (OCEPP), el 21,4% de la Población Económicamente Activa (PEA) trabajaba en una actividad de la economía popular, lo que proyectado a la población urbana total asciende a 4,2 millones de personas. De este total, la gran mayoría (82%) corresponden a cuentapropistas no profesionales.
Sin embargo, también debe sumarse un sector oculto para las estadísticas: la población económicamente inactiva pobre en edad de trabajar (18 a 65 años). Se trata de al menos dos millones ciudadanos que figuran como inactivos bajo los rubros “amas de casa”, “estudiantes” u “otros” pero en realidad son trabajadores que también realizan alguna actividad de economía popular.
En relación a la franja etaria, el 53% de los inscriptos corresponde a personas entre 30-64 años, mientras que un 46,6% pertenece al universo de los jóvenes de hasta 29 años.
Según la distribución geográfica, los nuevos datos marcan que las inscripciones alcanzaron a la totalidad de las provincias de la Argentina. Buenos Aires es la que encabeza el registro con 350.240 personas, seguida por Tucumán con 56.883, Salta 54.248, Chaco 52.771, Misiones 51.760, Formosa 51.364, Santa Fe 48.821, Córdoba 44.557, Jujuy 40.576, Santiago del Estero 38.907 y CABA 33.578.