La cantidad de colocaciones en plazo fijo tocó mínimos históricos en junio y se encuentra en niveles que no se observaban en más de 20 años. Con el desplome de la tasa de interés que implementó el programa económico del Gobierno, los depósitos privados en pesos cayeron 35,7% respecto al mismo mes del año anterior.
De acuerdo a un informe de la consultora LCG, en términos reales, el stock de plazos fijos se encuentra en mínimos históricos, al nivel de principios de 2003, siendo menos que la mitad que hace un año. Adicionalmente, continuaron recortando el tiempo de colocación promedio: 51 días, 1 día menos que en mayo.
Qué está pasando con los pesos en el sistema bancario
Los depósitos a la vista (caja de ahorro y cuenta corriente) mantuvieron la tendencia de crecimiento este mes, en esta ocasión a un ritmo del 5,1% mensual real, desacelerando levemente respecto a mayo (9,6% real). En términos anuales siguieron en terreno negativo (24,5%).
El ítem “Otros”, que refiere principalmente a depósitos remunerados de Fondos Comunes de Inversión (FCI), logró cierta recuperación luego de dos meses de caída mensual: +4,6% mensual real. En términos anuales, es el único en mostrar un aumento: 28,6% real.
Sin embargo, los crecimientos detallados anteriormente se vieron opacados por la caída mensual de los plazos fijos: 7,6% real. La tasa es poco atractiva frente al nivel de inflación y a las expectativas de subas de los dólares paralelos. Los plazos fijos muestran la peor caída interanual (51,7% real). La caída de las colocaciones a plazo también se vio en los atados a inflación, los cuales cayeron 15% mensual real en junio. Actualmente, representan apenas 0,5% del total de laos depósitos a plazo fijo, contra el 1,3% que significaban un año atrás.
En paralelo, los depósitos en moneda extranjera aumentaron un 1,2% mensual medido a fin de mes (207 millones de dólares), totalizando 17.900 millones de dólares.
"Las reducciones de tasa de interés que llevó a cabo el BCRA y el aún elevado nivel de inflación, junto con renovadas expectativas de movimientos cambiarios, nos hacen prever que continuará un proceso de desintermediación bancaria para lo que resta de 2024. Una desaceleración de la inflación podría atemperar esto, y de hecho colaboró en una incipiente recomposición de las cuentas a la vista, desde niveles mínimos", analizó el informe.
Además, el pedido del FMI por dejar atrás las tasas negativas podría fomentar el acceso a los depósitos a plazo que continuarían en un nivel bastante inferior al año pasado. Los depósitos a la vista remunerados, depositados principalmente por FCI, comenzaron a perder atractivo y se proyecta que "la caída marcada en los últimos dos meses se extienda debido a su baja tasa de rendimiento", sostuvo el documento. En suma, "la intermediación bancaria continuará sujeta a las señales de la política monetaria, las cuales continúan siendo muy inciertas", añadió.
A contramano de la dinámica general, después de 24 meses, los préstamos con garantía real presentaron un crecimiento del 4,3% mensual real. Los prendarios crecieron 8,5% mensual real, más que compensando la caída de los hipotecarios (-3,7% real). Sin embargo, contra junio de 2023, los préstamos con garantía real se desplomaron al 51,4% real.
Por último, la consultora fue prudente a la hora de evaluar qué pasará de cara a diciembre: "Con la inflación y la actividad encontrando cierto piso, podrían verse nuevas mejoras que se conjugarían con la estrategia de tasas bajas, que desestimula el ahorro, pero estimula la demanda de crédito. Otro punto a monitorear será la evolución de los préstamos hipotecarios, para los cuales se había anunciado cierta reactivación, pero que todavía no se observa en los datos. No esperamos, sin embargo, una gran expansión del crédito a lo largo del año".