El IPC GBA Ecolatina trepó 3,6 por ciento entre la primera quincena de febrero y el mismo período de enero. "La desaceleración respecto a enero (4 por ciento) del Nivel General no se trasladó al IPC Núcleo, que se mantiene en 4 por ciento y refleja la fuerte inercia del proceso inflacionario", señala el último informe.
De acuerdo con la consultora que dirige Lorenzo Sigaut Gravina, si bien la carne vacuna cerraría el mes creciendo a un ritmo similar al del resto de los precios, se espera un mayor dinamismo de bienes de consumo masivo, a diferencia de lo ocurrido en los últimos meses. "Esta tendencia se sostendría durante la segunda parte de febrero, que cerraría con una inflación en torno del 3,3 por ciento", advierte Ecolatina. La consultora estima que la inflación será de 43 por ciento este año.
La estacionalidad propia de marzo (educación, indumentaria, por ejemplo), así como ajustes en prepagas, combustibles y posible actualización de tarifas, le pondrían un piso elevado al tercer mes del año llevando la inflación acumulada del primer trimestre del año a superar 10 por ciento.
En este contexto, anclar el tipo de cambio oficial se perfila como la principal arma del gobierno para contener la suba de precios en la previa a la "temporada alta" de negociaciones paritarias.
"La aceleración de la inflación, más marcada aún en el sensible rubro alimentos y bebidas, ha generado una reacción dual del gobierno. Por un lado, insistir en la estrategia fútil de controles de precios. Por el otro, comenzar a utilizar el tipo de cambio oficial como ancla para contener la suba de precios de los productos transables", sostiene Sigaut Gravina.