Tal como adelantó El Destape, el gobierno de la provincia de Buenos Aires prorrogó el congelamiento de la tarifa de luz hasta el 31 de diciembre de 2020. Además, se prevé que en 2021 se desdolarice la estructura del cuadro tarifario, lo cual podría recortar futuros incrementos del servicio.
El gobernador Axel Kicillof encabezó la reunión donde se firmó el acuerdo que extiende el congelamiento de tarifas eléctricas hasta fin de año. El convenio fue rubricado por el ministro de Infraestructura y Servicios Públicos, Agustín Simone, y el presidente del grupo DESA, que concentra a las cuatro concesionarias eléctricas (Eden, Edes, Edea y Edelap) que comanda Rogelio Pagano.
La medida se remonta a la Ley de Emergencia Económica y Social, cuando el gobierno bonaerense había suspendido por 180 días, a partir del 31 de enero, la aplicación de aumentos de tarifas para las distribuidoras de energía eléctrica. En ese momento, Kicillof había firmado un acuerdo que establecía que el congelamiento de las tarifas será para los usuarios de las empresas que operan en toda la provincia de Buenos Aires.
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Además del congelamiento de la tarifa, durante el plazo fijado, se había estipulado llevar a cabo un proceso de análisis y revisión de los ingresos requeridos y reconocidos en los cuadros tarifarios de la Revisión Tarifaria Integral (RTI), que incluye el cumplimiento de las inversiones comprometidas. Además, se previó estudiar los componentes tenidos en cuenta por las empresas para calcular los aumentos futuros.
La historia comenzó en enero de 2017, durante la gestión de María Eugenia Vidal. Como resultado de la RTI, el Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos estableció los nuevos cuadros tarifarios para las distribuidoras regionales.
Allí se fijó un mecanismo de ajuste anual del valor agregado de distribución (VAD), que se aplicaría en agosto de cada año. En la fórmula polinómica se ponderó el tipo de cambio (8%), el Índice de Salarios (56%), la inflación mayorista (24%) y la minorista (12%). De esa forma, se incluyó al dólar en la fórmula de ajuste como un ponderador de los costos de capital.
El VAD configura el importe que las empresas destinan para afrontar los costos que significa construir, operar y mantener la infraestructura de la red eléctrica, es decir: obras, insumos, maquinarias, salarios, entre otros. La consecuencia fue que la dolarización de una fracción de esta variable fue aprovechado por el sector empresarial.
Desde el gobierno bonaerense ya dan por hecho que habrá desdolarización, ya que la decisión está tomada. Sin embargo, dada la suspensión de aumentos, no se aplicará ninguna fórmula de ajuste nueva aún.
De acuerdo a lo que pudo averiguar este medio, los equipos técnicos de la Provincia buscarán ponderar con índices que reflejen la estructura de costos local, aunque no trascendieron las variables que reemplazarán a la moneda estadounidense en la estructura del cuadro tarifario.