El inesperado fenómeno en los precios de alimentos en el conurbano que hace sonreír a Milei y que genera preocupación

El descenso del consumo de alimentos también llegó a los barrios y se reflejó en caída de las ventas y una fuerte desaceleración de las subas de los precios.

09 de mayo, 2024 | 09.45

Producto de la recesión, el precio de los alimentos en los barrios del conurbano se moderó fuerte y en promedio registraron una leve caída durante abril y el costo de los productos que componen la canasta básica de una familia se ubicó en los 340 mil pesos. En el mes que se fue, el rubro de almacén subió apenas 1,6 por ciento y las carnes un 3,2 por ciento, mientras que las frutas y verduras cayeron 9 por ciento.

Según el relevamiento mensual del Instituto de Investigación Social Económica y Política Ciudadana (Isepci) en los negocios de cercanía de 20 distritos del conurbano bonaerense, en abril no hubo incrementos considerables y el valor total promedio de la canasta básica se mantuvo estable. Una familia de dos adultos y dos niños pequeños requirió en marzo $ 338.945,78 para adquirir los alimentos básicos de todo el mes, mientras que en abril necesitó $ 338.679,83, o sea que tuvo una variación mínima de -0,08 por ciento. Respecto al mismo mes del 2023, los incrementos promediaron el 270,76 por ciento.

Este proyecto lo hacemos colectivamente. Sostené a El Destape con un click acá. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

El sector de frutas y verduras tuvo una importante baja mensual:(-9,12 por ciento); mientras que los productos de almacén aumentaron 1,57 por ciento y las carnes subieron 3,23 por ciento. En la comparación interanual los productos de almacén se incrementaron 310 por ciento, y los de carnicería y verdulería 257,72 por ciento y 206,56 por ciento, respectivamente.

"El descenso del consumo de alimentos también llegó a los barrios y se reflejó en caída de las ventas y una fuerte desaceleración de las subas de los precios", señaló el informe al que accedió El Destape. El incremento de "acumulación en stocks de productos que no tienen el movimiento habitual, obligaron a las cadenas mayoristas a moderar los aumentos, y a las cadenas de supermercados a multiplicar ofertas", explicaron desde Isepci.

Variación mensual e interanual de los alimentos

Los datos que muestran la peor cara de la crisis y la mentira de la "deflación"

En medio de una fuerte caída de la actividad económica, con un desplome del 54 por ciento de utilización de la capacidad instalada de la industria contra 62 por ciento del mismo mes de 2023; caída en el Estimador Mensual de Actividad Económica del 3,2 por ciento respecto al mismo mes del 2023; descenso de la producción industrial del 9,9 por ciento respecto al mismo mes del año anterior y 11,1 por ciento en comparación con el primer bimestre del 2023, el consumo interno y las ventas se desplomaron a niveles inéditos.

La última publicación del INDEC da cuenta de un descenso pronunciado de las ventas en supermercados durante el primer trimestre del actual gobierno, tanto en la comparación interanual como en la mensual. Según la CAME, el sector de alimentos claramente es de los que más bajas está sufriendo. Las ventas en los pequeños y medianos comercios de alimentos en abril descendieron 8,5 por ciento respecto al mismo mes del 2023, mientras que durante los cuatro primeros meses de este año se desplomaron un 23,8 por ciento.

En este contexto, referentes del Gobierno y actores fundamentales en el aparato de comunicación celebraron en la última semana la baja de precios en algunos productos de consumo masivo, algo que en tono victorioso denominaron como "deflación". En parte es lo que reflejó el informe de Isepci.

La deflación (o inflación negativa) es el fenómeno contrario a la inflación, es decir, una caída general y continuada de los precios de la economía y, aunque puede parecer que una bajada en los precios es algo positivo, la realidad es que tiene efectos muy perjudiciales en la economía. En primera instancia, la caída de precios fue solo verificada en algunos productos y no a nivel general, por lo cual lo acontecido en abril es una fotografía, no una película. En 2001, en medio de una de las peores crisis de la historia, sí se registró este fenómeno, ya que los precios se redujeron 1,1%, producto de la convertibilidad y la caída en la actividad.

Hasta el economista Carlos Melconian -referente de Patricia Bullrich en la campaña de 2023- aseguró que Argentina no está transitando un sendero de deflación, ya que indicó que hay precios regulados, como el de los servicios públicos, "a los cuales les falta acomodarse". Además, sostuvo que si bien la actividad económica "va a tener un rebote", la discusión debe pasar por ver "cuándo se quiebra el techo en el que estamos desde 2011".