El Banco Central (BCRA) finalizó su actividad con ventas por U$S 150 millones para atender la demanda en el mercado. Así, durante este puñado de días de noviembre acumula un rojo de casi U$S 400 millones y de seguir esta dinámica, este martes podría superar el rojo registrado en todo octubre. En el Gobierno atribuyen parte de este registro al pago de importaciones previstas en el sistema anterior que terminó a mediados de este mes.
La autoridad monetaria que conduce Miguel Pesce comenzó la semana con ventas por US$ 150 millones para atender las necesidades del mercado. El monto de ventas efectuado hoy no se repetía en esa magnitud desde los primeros días de agosto.
En los primeros días de noviembre, el Central acumula ventas por más de US$ 390 millones y se aproxima al rojo total del mes pasado. En octubre, el ente se había desprendido de US$ 496 millones.
La dinámica negativa parece consolidarse luego de que el Estado haya recaudado alrededor de U$S 5.000 millones a través del esquema de un dólar diferencial para los productores de soja. Desde la finalización de ese sistema, las reservas no volvieron a engrosarse y la preocupación del ministro de Economía, Sergio Massa, aumenta a medida que crecen las dificultades para captar divisas.
El mercado presenta un escenario con falta de ingresos genuinos que fueron anticipados por los exportadores en septiembre, durante la vigencia del dólar soja. Ante la caída de la oferta, el Banco Central aparece como el principal abastecedor de divisas, lo cual contradice el objetivo de acumulación de reservas.
Desde el Central restaron importancia al dificultoso arranque de mes y remarcan que todavía hay operaciones de pago de importación emitidas bajo el sistema SIMI, lo cual representa un volumen muy alto que se espera descienda en las próximas semanas. Con la inauguración del nuevo control de importaciones se espera un descenso paulatino de los montos operados.
El Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA) es un mecanismo que busca dar un mayor ordenamiento y trazabilidad completa a las operaciones y evitar casos de sobrefacturación, uso abusivo de cautelares y otras operaciones irregulares.
Desde el debut del SIRA, se registraron un total de 12.048 operadores, que realizaron 78.067 declaraciones. Eso representó una demanda US$ 8.265 millones. Dentro de ese universo, casi el 40% de los importadores son pymes, pero significan apenas del 9% de los dólares que solicitan al Banco Central