El uso de tarjetas prepagas creció un 49% en el último año, mientras que el volumen de dinero operado aumentó 325%. Sin embargo, lo que revela el dato es el aumento del consumo de rubros nacionales por sobre los gravados en dólares, como los servicios de gaming y streaming. El cambio en el patrón de compra induce a pensar sobre la caída del poder adquisitivo del salario.
De acuerdo a un informe de la compañía Global Processing, las cantidades de transacciones crecieron 11% contra el segundo semestre de 2023 y 49% versus el primer semestre de 2023. El volumen operado creció 82% y 325%, respectivamente. La suba incluso podría ser aún mayor en la segunda parte del año si el cobro del transporte público se amplía otros medio de pago y las propinas con dinero digital proliferan.
En cuanto al consumo, los principales rubros del segmento nacional se reparten entre los supermercados (36%), gastronomía (13%), combustible (11%), Tv y streaming (5%) y transporte y movilidad (5%). Por el costado internacional se destacan el gaming y el entretenimiento (60%), servicios profesionales (14%), Tv y streaming (12%), artículos de electrónica (9%) y supermercados (1%).
El consumo de rubros nacionales creció 19% contra el segundo semestre del año pasado y 61% a nivel interanual. A contramano, las compras para el rubro internacional se desplomaron 24% contra el último semestre de 2023 y 5% contra el primer semestre de 2023.
Qué son y cómo se usan las tarjetas prepago
Una tarjeta prepaga es una que no está vinculada a una cuenta bancaria específica. En su lugar, una persona debe depositar dinero a través de una plataforma, vía transferencia, por ejemplo, antes de poder gastarlo. Esto es similar a lo que sucede con las tarjetas de débito, aunque no es el sueldo el que se ingresa automáticamente, sino que la carga debe ser manual.
El 42% de las transacciones se procesa mediante dispositivos de pagos contactless, mientras que el 25% representan compras a través de ecommerce. Le siguen los pagos a través de tarjetas con chip y el débito automático con un 11% de las transacciones. Durante el primer semestre, el canal digital prevaleció por sobre el físicos, un hecho inédito hasta el momento. Los usuarios de tarjetas prepagas virtuales (51,16%) fueron más que aquellos que utilizan la tarjeta física (48,74%).
Global Processing es una compañía que desarrolla soluciones de pagos digitales en Latinoamérica y analiza el uso del producto prepago en Argentina, las tendencias de la industria y el comportamiento de los usuarios. “Dentro del abanico de opciones vigentes en el ecosistema financiero, encontramos que el producto prepago sigue creciendo y diversificando sus usos", señaló Patricia Furlong, CEO y Presidente de Global Processing.
A nivel nacional, tanto la cantidad de tarjetas como la cantidad de transacciones se concentran en la zona del Área Metropolitana de Buenos Aires, seguida por la región pampeana -Córdoba, La Pampa y parte de Provincia de Buenos Aires-, y el noroeste argentino. Sólo el 5% del volumen operado corresponde a transacciones internacionales, de las transacciones nacionales un 96% se destina a consumos -compras en tiendas físicas y online- y sólo un 4% a extracción por cajeros automáticos y comercios.
En cuanto al tipo de consumo con cada una, en la virtual predominan las compras en el rubro de gaming y entretenimiento, servicios profesionales, gastronomía, y servicios de TV y streaming, mientras que en la tarjeta física las compras del supermercado son las más habituales -el 34% de los usuarios utiliza la tarjeta para este gasto-, seguido por gastronomía y combustible.
Tarjetas prepagas, las preferidas de los jóvenes
Según los resultados del informe, cautro de cada 10 tarjetas prepagas pertenecen al segmento de entre 13 y 24 años, la denominada generación Z y Post Z. Del total de mujeres usuarias de tarjetas prepagas, el 39,52% pertenecen a Generación Z y Post Z y del total de hombres el 44% son hombres de la misma generación (Generación Z y Post Z). La distribución por género es equitativa también dentro del total de las tarjetas prepagas emitidas, con un leve aumento de la cantidad de usuarias mujeres: el 51,42% del total de las tarjetas están en manos de mujeres y el 48,51% de hombres.
Respecto de los segmentos etáreos, a medida que las personas usuarias de las tarjetas son más grandes, el ticket promedio aumenta, mientras que la Generación Z y Post Z se mantiene en el rango de ticket promedio más bajo. A pesar de que los "Baby Boomers" presentan el menor número de tarjetas emitidas (sólo un 4%), son quienes registraron durante el último semestre el ticket promedio más alto.