Matemático, investigador del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y coinventor de muchos de los protocolos que hoy son base para la criptografía moderna, Silvio Micali sostuvo que la tecnología blockchain será un motor del crecimiento económico, pero que la criptomoneda mas famosa del mundo no forma parte de ese esquema, porque "con Bitcoin sólo se puede hacer especulación".
Concentrado desde hace décadas en hacer más eficientes y seguras las transacciones a nivel mundial, Micali fundó en 2017 Algorand (ALGO), una de las principales plataformas blockchain del mundo con la que, asegura, se resuelven los problemas de escalabilidad, seguridad y eficiencia energética que tienen Bitcoin (BTC) y otras plataformas similares en el mundo cripto.
"Bitcoin no es la tecnología que va a hacer una diferencia real por el mundo", afirmó Micali en una entrevista con Télam y otros medios, en la que reconoció a BTC el mérito de "haber sido la primera" en aplicar la tecnología blockchain, pero que no por eso deja de ser una plataforma "centralizada", "sucia" e insegura.
"Soy un gran defensor del poder de blockchain y creo que Bitcoin tienen el mérito de ser el primero pero no es el tipo de blockchain que ambiciono para el mundo, no es una plataforma que traiga transparencia y crecimiento económico y oportunidades para el conjunto de la sociedad", dijo Micali.
En este sentido, agregó: "Con Bitcoin sólo se puede hacer especulación. Sólo puedo comprar Bitcoin al principio del año y, más tarde, venderlo y esperar que sea a un mayor precio".
Micali cargó contra el bajo nivel de operaciones que permite la plataforma de Bitcoin (apenas 16 por segundo) que son "demasiado pocas si quiero usar esa red para comprar pan o hacer transacciones financieras", el hecho de que sólo "dos pools de minería controlan la mayor parte de la emisión" y su alta demanda de energía para hacer funcionar las supercomputadoras que mantienen activa a la red en todo el mundo.
"Esto es opuesto a la descentralización. Es una red extremadamente centralizada, muy cara, perjudicial para el medio ambiente y para sólo un activo: el propio Bitcoin. Por eso, no es la tecnología que va a hacer una diferencia real por el mundo. El ser una reserva de valor al final del día no es suficiente", afirmó Micali.
A un año del comienzo de la euforia mundial por las criptomonedas, que llevó a Bitcoin a triplicar su mayor precio histórico y al conjunto del mercado cripto a superar los 2,5 billones de dólares de cotización, el matemático italiano aseguró no estar interesado en el precio de ALGO ni en el de BTC, sino en en las aplicaciones que se le dará a la tecnología blockchain en la forma en la que personas y empresas realizan transacciones diarias en el mundo.
"Creo que deberías poder poner todo tipo de activos en una blockchain como activos financieros, inmobiliarios o de todo tipo. Pero si tienes una red con sólo un activo (como el caso de Bitcoin) no hay que sorprenderse cuando se vuelva un juego especulativo", aseguró.
En cambio, el interés de Micali pasa por que la tecnología blockchain pueda proveer infraestructura para el desarrollo económico y hacer más eficientes procesos que hoy son muy costosos: "El 6% del producto bruto global se va en fricciones financieras. Es demasiado. Ahí hay una gran oportunidad para mejorar".
De visita por la región, Micali se reunió esta semana en Uruguay con su presidente, Luis Lacalle Pou, y con el jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larrreta, con quienes habló sobre las posibilidades de aplicar tecnología blockchain en distintas funcionalidades de gobierno, como el caso de Colombia, donde su pasaporte sanitario corre sobre la plataforma de Algorand.
Los cambios que está trayendo estas nuevas tecnologías, como la posibilidad de encriptar e individualizar activos de todo tipo -desde commodities hasta obras de arte-, realizar contratos inteligentes de liquidación inmediata o acceder a préstamos colateralizados están camino a volverse moneda corriente en los próximos años.
Al respecto, afirmó: "Creo que la ventana de tiempo que tienen los reguladores no es infinita porque la gente va a querer hacer operaciones de este tipo, sin importar lo que digan los reguladores y, si no se hace nada, lo que habrá es una mala blockchain va a ocupar ese lugar y el problema para los reguladores es que, en este caso, no tendrán una oficina que clausurar".
Uno de los cambios que más le atrae a Micali es la posibilidad de hacer "pagos bidireccionales" a través de blockchain, es decir, una única transacción en la que la persona que ofrece un bien y quien lo paga reciben lo que desean en apenas segundos con un costo por operación muy bajo.
"Existe una diferencia muy clara entre pago unilateral o bidireccional. En Algorand yo sé que si te pago algo a vos, en 4,4 segundos voy a recibir lo que quería con un costo por la operación de una fracción de centavo. Puedo pagarte en lo que quiera: en dólares, en euros o en lo que quiera. Por eso, será el pagador el que quiera acceder a este tipo de servicios, porque con éstos se asegura que tendrá por lo que pagó", explicó Micali.
"Una vez que se entienda esto, ¿quién volvería a elegir pagos unilaterales?", preguntó el matemático.
Atraído por los múltiples proyectos que llegaban desde la Argentina, Micali decidió invertir recientemente en Agrotoken, una empresa local que provee a los productores agropecuarios la posibilidad de tokenizar -digitalizar e identificar inequívocamente un activo en una blockchain- sus cosechas de soja, trigo y maíz para así poder venderlas cuando deseen de forma inmediata en unidades muy pequeñas, ya que cada token representa a una tonelada de cada grano y puede dividirse en hasta 10.000 partes.
"Me enamoré con la visión y con una oportunidad de billones de dólares", dijo Micali sobre el producto argentino que, aseveró, "es algo revolucionario para el mundo".
"Le permite liquidez al productor para conseguir un puñado de granos que puede vender y que puede mover por una fracción de un centavo. Es muy eficiente. Creo que esto será un gran impulso para la economía argentina", afirmó.
Con información de Télam