El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) otorgará un crédito de U$S 80 millones a la Argentina destinado a fortalecer el aparato Pyme. El organismo liderado por Mauricio Claver-Carone había sido crítico con la situación económica del país, pero tras haberse comunicado con el ministro de Economía, Sergio Massa, comienza a destrabarse el flujo de dólares para proyectos productivos.
Según consignó la Secretaría de Industria y Desarrollo Productivo, el programa "fomentará el desarrollo productivo innovador y ambientalmente sostenible de las mipymes y promoverá su transformación digital, fortaleciendo la asistencia gubernamental para estas empresas en todas las regiones del país". Adicionalmente, el proyecto fortalecerá la red federal de servicios de apoyo y promoverá la descentralización de los programas e instrumentos de la cartera.
Además de las mipymes, el proyecto beneficiará a las entidades oferentes de servicios tecnológicos con equipamiento y capacitación, a trabajadores que serán capacitados en habilidades digitales, y a las mujeres empresarias y a las personas con discapacidad que recibirán apoyo adaptado a sus necesidades. Este programa incorporará servicios técnicos y tecnológicos que ayuden a las mipymes a adoptar nuevas tecnologías, adaptarse a una economía baja en emisiones y resiliente a impactos de cambio climático e incorporar la perspectiva de género y diversidad. También se promoverá asistencia técnica y capacitación a aproximadamente 1.300 empresas para apoyar proyectos de innovación.
El crédito del BID de U$S 80 millones tiene un plazo de amortización de 25 años, un período de gracia de cinco años y medio y una tasa de interés basada en SOFR, publicada por la Reserva Federal de Nueva York desde el año 2018, y que refleja el costo a un día de los préstamos garantizados con Repos de títulos del Tesoro norteamericano.
La llegada de Massa cambió el panorama del BID
Hace algunos días, Claver-Carone había asegurado en una columna de opinión que la entidad no puede girar a la Argentina unos 500 millones de dólares debido a problemas de falta de transparencia y un “tumultuoso historial financiero”. Este funcionario fue el asesor clave en la gestión de Donald Trump para destrabar la aprobación del crédito más grande de la historia del FMI, a pesar de no contar con las condiciones de repago de la deuda.
El Gobierno le requiere a este organismo que le apruebe un préstamo incondicional por esa cifra, pero el directorio de la entidad se niega por ahora. Estos fondos estarán destinados a la seguridad vial y la atención de salud en la provincia de Buenos Aires.
“El éxito de la Argentina es el éxito del BID, pero el tumultuoso historial financiero de Argentina afecta singularmente a los costos del banco. El BID debe proteger su capacidad de ayudar de forma fiable a todos sus 26 prestatarios, incluidos los países pequeños con pocos recursos”, expresó Claver-Carone en una columna publicada en Wall Street Journal. Y añadió: "Por mucho que el BID quiera aprobar nuevos fondos para la Argentina, no puede dar el visto bueno a las solicitudes para hacerlo sin asegurarse prudentemente de que tiene un impacto en el desarrollo”.
Tras el arribo de Massa al gabinete, el tigrense se reunió con Claver-Carone y destacó avances en la negociación para destrabar créditos para la Argentina. Al mismo tiempo, se comprometieron a reunirse en persona hacia fines de agosto cuando Massa visite a Washington, junto a la titular del Banco Nación, Silvina Batakis. Allí también dialogará con máximas autoridades de FMI, Banco Mundial y el Tesoro de Estados Unidos.