El Banco Nación (BNA) lanzó la nueva línea de créditos hipotecarios "+Hogares con BNA", que estará disponible a partir del 20 de mayo. Con una inversión de U$S 4.000 millones, se proyecta otorgar hasta 40 mil préstamos en tres años.
Esta iniciativa ofrece un beneficio único: los usuarios podrán abonar una prima de 1,5 puntos porcentuales, lo que les permitirá ajustar el aumento de la cuota según el coeficiente de variación salarial (CVS), evitando que esta supere el aumento de haberes. La propuesta del BNA abarca la compra, cambio, construcción, refacción, ampliación de viviendas en todo el país, así como la adquisición de una segunda casa.
El presidente del BNA, Daniel Tillard, afirmó que "la indicación que recibimos del presidente de la Nación, Javier Milei, es impulsar el crédito. Una parte importante de la recuperación económica viene de la mano del crédito bancario". De este modo, la entidad financiera se sumará a los bancos que salieron con sus líneas de préstamos ajustados por inflación como Hipotecario, Ciudad, ICBC, Del Sol y, en las últimas horas, el Banco de Córdoba.
¿Qué es un crédito hipotecario?
Un crédito hipotecario es un préstamo a largo plazo que se otorga con el fin específico de financiar la compra de una propiedad, ya sea una casa, un departamento o un terreno. Este tipo de préstamo está respaldado por una hipoteca sobre el inmueble que se adquiere, lo que significa que si el prestatario no cumple con los pagos, el prestamista tiene el derecho de ejecutar la hipoteca y vender la propiedad para recuperar el dinero prestado.
El funcionamiento básico de un crédito hipotecario es el siguiente:
-
Solicitud: el proceso comienza con la solicitud del préstamo hipotecario por parte del comprador de la propiedad. La entidad financiera evaluará la capacidad de pago del solicitante, su historial crediticio y otros factores relevantes para determinar si es elegible para el préstamo.
-
Aprobación y condiciones: una vez que la solicitud es aprobada, se establecen las condiciones del préstamo, incluyendo el monto del préstamo, la tasa de interés, el plazo de pago y otros términos y condiciones.
-
Tasación y estudio legal: la propiedad que se va a comprar se somete a una tasación para determinar su valor real y se realizan estudios legales para asegurarse de que no existan problemas legales que puedan afectar la compra.
-
Firma del contrato: una vez que se completan los pasos anteriores, se firma el contrato de préstamo hipotecario, donde se establecen todas las condiciones acordadas entre el prestatario y el prestamista.
-
Desembolso del préstamo: el prestamista realiza el desembolso del préstamo, es decir, transfiere el dinero acordado al vendedor de la propiedad o a la cuenta designada para ello.
-
Pago de cuotas: el prestatario comienza a realizar pagos periódicos, generalmente mensuales, que incluyen una parte del capital prestado más los intereses devengados. Estos pagos se realizan durante el plazo acordado hasta que se haya saldado completamente la deuda.