Una auditoría de la Sindicatura General de la Nación (Sigen) detectó irregularidades y debilidades de control en la Superintendencia de Servicios de Salud durante la gestión de Mauricio Macri. El informe refleja desde problemas asociados a deficientes soportes informáticos hasta fallas severas en el control de obras sociales y empresas de medicina prepagas.
El informe de control interno realizado por Sigen, constató la falta de auditorias económicas y financieras por varios años, a 34 de estas empresas y obras sociales. De esta manera, no se constató la aprobación de los balances de dichas empresas.
Deudas sin justificación
Por otra parte, el informe reveló un alto grado de morosidad en la entrega de los Estados Contables que deben efectuar las Entidades de Medicina Prepaga. En términos de control prestacional, las fallas también son múltiples.
Por ejemplo, no se verificaron acciones de control formal del cumplimiento del Programa Médico Obligatorio (PMO) por parte de las empresas de medicina prepaga, con su eventual impacto en el ejercicio de los derechos de los beneficiarios del sistema que requieren de prestaciones amparadas legalmente.
Cabe recalcar que el PMO representa una “canasta básica” de prestaciones obligatorias para todas las prepagas y obras sociales, un detalle de las obligaciones que tienen que cubrir como mínimo en cualquiera de sus planes.
Tal como describe el informe de la Sigen, también se encontraban pendientes de registración en la Superintendencia de Salud los Planes Básicos aprobados para las entidades de Medicina Prepaga. Esta situación se agudiza en términos de prestaciones de Habilitación y Rehabilitación Integral en favor de las personas con discapacidad.
Con respecto a subsidios y reintegros, la Superintendencia no contaba al 31 de diciembre de 2019 -cierre del informe- una base de datos confiable que ofrezca información histórica detallada para conocer el estado en que se encuentran registrados los subsidios entregados por la Administración de Programas Especiales (APE).
Por otro lado, si bien existen obras sociales con deudas prestacionales -en muchos casos de magnitudes muy importantes- a Hospitales Públicos de Gestión Descentralizada (HPGD), no se detectaron sanciones desde el organismo para estas obras sociales. Asimismo, la auditoria detectó criterios confusos para el otorgamiento de subsidios, impidiendo conocer así la real necesidad de cada beneficiario.
Aumentos indebidos
Según el informe de la Sigen, a partir de las presentaciones puntuales de algunas empresas fueron autorizados aumentos generales a todas las entidades de Medicina Prepaga, sin tener en cuenta una normativa donde se establecía que las firmas que pretendían aumentar el monto de las cuotas que abonan los usuarios, debían presentar en forma individual justificando el requerimiento a la Superintendencia de Servicios de Salud.
Por consiguiente, “se autorizaron incrementos de cuotas respecto de entidades que no lo solicitaron, incumpliendo la normativa vigente”, relata la auditoria.