Un día después de que la cadena chilena de tiendas Falabella anunció su intención de irse de la Argentina, el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, consideró hoy que en el país no existe una causa económica para que se vayan las compañías. "Yo no veo que haya una situación particular de la Argentina que provoque la salida de empresas, sino que son decisiones empresariales tomadas por algunos motivos", aseguró el funcionario durante el anuncio de extensión por 90 días del bono de 5000 pesos.
El ministro reconoció que "hay empresas que se están retirando del país", pero consideró que el "consumo sigue funcionando razonablemente bien y la industria está repuntando". "Argentina en comparación a nuestros países vecinos ha tenido menor pérdida de empleo de modo tal que el consumo sigue razonablemente bien y la actividad está repuntando", dijo Moroni, y respaldó sus palabras en el informe de la Unión Industrial Argentina que incluso registró un repunte en el empleo industrial.
Respecto de la comunicación de Falabella de buscar un comprador para sus negocios en el país, Moroni dijo: "No es que decidió retirarse solamente de la Argentina, sino que está en un proceso muy especial la compañía y, entre esas decisiones, decidió cancelar parte de la operación en la Argentina".
Al ser consultado sobre la otra empresa chilena que anució su retirada, la aerolínea Latam, consideró que se juntas "cosas que son distintas". "Hay empresas que se están retirando del país. LAN está en un proceso de lo que se llama 'capítulo 11' en Estados Unidos, que es un proceso concursal, no decidió solo retirarse de la Argentina", ejemplificó.
"Argentina, en rigor, en comparación con gran parte de los países ha tenido menos pérdida de empleo que todos nuestros países vecinos", agregó el ministro.
Falabella ya había comenzado el cierre de sus locales y el achicamiento de su firma en la Argentina a comienzos de 2019 luego de más de un año de una severa recesión en las ventas que llevó a la ruina económica de empresas como Musimundo, Walmart, Alpargatas y Pepsico. El balance del primer semestre de 2019 había cerrado con un desplome del 5,7%.
La primera persiana la bajó Falabella en febrero de 2019, en el local que la empresa tenía la calle Florida al 60. En esa calle la firma tenía tres locales más. En 2019 se dio una de las peores caídas del consumo en un década con un desplome cercano al diez por ciento con respecto al mes anterior en bienes durables como indumentaria y electrodomésticos, productos que comercializaba Falabella.