El Gobierno recortó las transferencias hacia las provincias en torno al 80% comparado con la ejecución presupuestaria del año pasado. Esto implicó un ajuste de partidas para obras públicas y programas específicos con incidencia en todos los municipios del país. El cuadro se complejiza luego de analizarse el impacto de la crisis económica, su efecto en los niveles de recaudación, y, por ende, la fuerte caída de los envíos de dinero por coparticipación, leyes especiales y las compensaciones acordadas en el Pacto Fiscal.
De acuerdo a un reciente trabajo del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), el conjunto de las provincias del país dejó de percibir 5,4 billones de pesos como consecuencia de la caída real del consolidado de las transferencias totales en los primeros 9 meses del año.
Un toque de RON
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Los ingresos provinciales provienen básicamente de dos fuentes: lo que recaudan por Ingresos Brutos, Inmobiliario, Automotor y Sellos; por otro lado, los llamados Recursos de Origen Nacional (RON), explicados principalmente por las transferencias por coparticipación. En promedio, los RON representan cerca del 70% de los ingresos de todas las jurisdicciones, aunque existen provincias más dependientes que otras.
Por ejemplo, en el caso de Formosa, su economía depende en un 77% de las transferencias de Recursos de Origen Nacional. Le siguen casos como Catamarca (78,5%), La Rioja (75%), Jujuy (70,1%), Chaco (69%) y San Juan (70,5%), entre otras.
En el noveno mes del año, las transferencias de los RON representaron una baja real del 2%; este dato mejora lo sucedido en meses anteriores, básicamente porque se registró un incremento excepcional de lo recaudado por Ingresos Brutos. En el caso de los recursos vinculados a la Ley Federal de Coparticipación – financiada por la recaudación de IVA y el Impuesto a las Ganancias- la merma real fue del 14%.
Para el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), la caída de la coparticipación de septiembre se explicó por una disminución de los ingresos reales por IVA del orden del 15,5%, mientras que Ganancias reportó una reducción del 13%.
“El desplome de ambos impuestos se vio compensado en parte por el incremento de los recursos derivados de los leyes y regímenes especiales, especialmente por la recaudación del impuesto a los Bienes Personales”, agregaron desde CEPA.
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La película se completa al analizar lo sucedido durante el período enero – septiembre. “En el acumulado al noveno mes del año, las transferencias automáticas por coparticipación, leyes complementarias y compensaciones tuvieron una caída real del 12,6% al descontar la inflación del período”, puede leerse en el trabajo del Iaraf.
La caída de recursos se hace más pronunciada si solo se analizan las leyes complementarias vinculas a la coparticipación y las compensaciones del Pacto Fiscal. “Descontando el proceso inflacionario del período, esto se traduciría en una caída real del 24%”, agregaron desde el Iaraf. Algunas jurisdicciones fueron más afectadas que otras. En el caso de Buenos Aires, la merma fue de 26,3%, seguida por Catamarca (-22,8%), Mendoza (-23,9%) y Tierra del Fuego (-18,3%), entre otras.
La conclusión del Iaraf es contundente: si se toman en cuenta todos los Recursos de Origen Nacional, las leyes complementarias y las compensaciones del Pacto Fiscal, el conjunto de las provincias del país dejó de percibir 5,4 billones de pesos como consecuencia de la caída real del consolidado de las transferencias totales en los primeros 9 meses del año.
En el caso de la provincia de Buenos Aires, fueron 1,3 billones de pesos menos. Por citar otros ejemplos, Santa Fe tuvo una caída real de transferencias por 464.000 millones de pesos, seguida por Córdoba (-450.000 millones), Entre Ríos (-248.000 millones), Formosa (-183.000 millones) y Catamarca (-134.000 millones), entre otras.
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