Pese a que el Gobierno esperaba que la baja de la inflación en mayo permitiese el inicio de un sendero de recuperación de los ingresos, esto no parece haberse producido, ya que el mes pasado el consumo en los supermercados volvió a caer respecto a abril en más de 2 puntos.
Javier Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, se entusiasman con el anticipo de las consultoras privadas, que la semana pasada afirmaron que mayo terminó con una inflación de entre el 4 y el 5%. Se trataría, si es finalmente confirmado por el Indec, de una importante baja respecto al 8,8% de suba de precios registrada en abril, aunque en buena medida debido a la postergación de la suba de combustibles y de tarifas de luz, gas y transporte.
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Además, el Presidente había manifestado en febrero pasado que "lo peor", en materia de actividad económica, sería "entre marzo y abril". A fines de abril, de hecho, había dicho también que "los salarios han empezado a ganarle a la inflación". Pero la caída de la inflación en mayo no parece haber sido suficiente para evitar que la recesión siga profundizándose en mayo, en contra del pronóstico del jefe de Estado.
Así puede verse, al menos, a partir del consumo en supermercados. Fuentes del supermercadismo precisaron a El Destape que las ventas en las grandes cadenas cayeron en mayo un 2,4% respecto a abril de este mismo año, medido en cantidades. En la medición interanual, la caída fue del 11% respecto a mayo de 2023.
Se trata de una cifra especialmente preocupante. En primer lugar porque en abril, a su vez, la caída de las ventas de en productos de consumo masivo en grandes supermercados había sido de un 14,4% respecto a marzo, según cifras de Focus Market, por lo que mayo ya partía de una base muy baja.
Y, en segundo lugar, porque la enorme caída de abril se produjo no tanto por una nueva baja del poder adquisitivo (que igualmente se produjo) sino por las importantes subas en las tarifas o precios regulados. Es decir que, en mayo, el consumo masivo volvió a caer aun cuando la mayoría de las subas tarifarias fueron pospuestas, lo que arroja una perspectiva sombría para junio, cuando precios regulados como la luz, el gas y los combustibles volvieron a aumentar.
En este contexto, las fuentes del supermercadismo consultadas por este portal mostraron su molestia e incredulidad con las cifras difundidas por Antonio Aracre, exasesor presidencial de Alberto Fernández y ex CEO de Syngenta, reconvertido estos meses en tuitero pro libertario.
"Por las promociones implementadas para recuperar volumen, la baja de la inflación y la incipiente recuperación de ingresos las VENTAS en grandes cadenas de SUPERMERCADOS cerrarían MAYO con un crecimiento del 5% respecto a abril", afirmó Aracre en su cuenta de X (Twitter) la semana pasada. Este mismo lunes reafirmó: "Venta supermercados MAYO total país cierra con 8% de crecimiento en $$$ [pesos] y 4% en qqq [cantidades] con respecto a ABRIL. Podemos afirmar que el PISO fue ABRIL y que en mayo el gobierno de Javier Milei inició la reactivación económica". Lamentablemente, no sería el caso.
"No tenemos idea de dónde sacó (Aracre) esas cifras", afirmaron las fuentes del sector supermercadista consultadas por El Destape, y, remarcando la caída verdadera, ironizaron: "La cartera de la dama y el bolsillo del caballero fueron vaciados por la mano invisible del mercado".