El saldo comercial de febrero dio cuenta de un superávit de 1438 millones de dólares. Las exportaciones registraron un incremento del 5,6% en la comparación interanual (5531 millones), mientras que las importaciones cayeron un 18,6% (4093 millones). Si bien mejoraron las ventas de los productos primarios luego de la sequía del año pasado (soja y trigo, principalmente), en el horizonte se consolida la baja en los precios internacionales de las materias primas, situación que profundizará los efectos de la recesión planificada por la administración de Javier Milei. Por el lado de las importaciones, la categoría de Piezas y Accesorios, clave para el desarrollo industrial local, cayó un 21% en sus cantidades adquiridas. Otra señal de la crisis.
Las exportaciones en febrero aumentaron 5,6% en comparación con igual mes de 2023 (292 millones de dólares); este resultado se explicó por un avance del 13,5% en las cantidades vendidas mientras que los precios tuvieron una merma generalizada cercana al 7%. El cereal que más ventas anotó fue el trigo.
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Las señales de la alerta son múltiples. “Las ventas externas de trigo acumuladas hasta la actualidad se ubican un 35% por detrás del promedio de exportaciones observado para igual período del último quinquenio, y se destacan como el segundo volumen más bajo en los últimos ocho años”, describió Ernesto Mattos, director del Instituto de Estudios para el Desarrollo Productivo y la Innovación de la Universidad Nacional de José C. Paz.
Según los datos de la Bolsa de Comercio de Rosario, en la primera quincena de marzo se comercializaron al exterior 3,9 millones de toneladas, cuando en los últimos cinco años el promedio vario entre las 6,5 y 8 millones de toneladas, a excepción del 2023 como consecuencia de la sequía.
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“Al magro volumen exportado se le suma una baja sustancial de la cotización FOB del cereal. Al cierre de la semana pasada, el precio de referencia de exportación del trigo desde los puertos del Up-River se ubicó en 220 dólares la tonelada, una caída del 38% respecto de la cotización del año anterior”, agregó Mattos.
La baja en el precio internacional de las materias primas también impacta en la soja. Las ventas al exterior de la oleaginosa y sus subproductos sumaron 1.038 millones de dólares y aumentaron 8,6% en términos interanuales. Y si bien hubo una suba del 43% en las cantidades vendidas, también se registró un descenso en los precios del orden del 24%.
La merma en los valores de venta fue generalizada: el precio internacional de los porotos de soja disminuyó un 39%; seguido por aceite de soja en bruto (-31,4%); harina y pellets de la extracción del aceite de soja (-12,8%); y aceite de soja refinado.
Concentrados
En cuanto al trigo, de acuerdo a los registros de las Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior que publica la cartera de Agricultura, desde el cierre del año pasado hasta la fecha, se emitieron permisos de exportación por 705.355 toneladas.
De ese total, la empresa Cargill se quedó con 180.000 toneladas, seguida por CHS con 135.000 toneladas. Luego aparecen LDS (Louis Dreyfus Company) con 45.000 toneladas y Molino Cañuelas, con otras 38.000 toneladas. En total, 4 empresas concentraron el 57% de los permisos de exportación.
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En cuando a las ventas de soja, el total de las DJVE alcanza a las 6,3 millones de toneladas. Solamente dos empresas concentraron el 25% de las ventas, por un total de 1,6 millones. En realidad, no fueron dos sino una: Bunge- Viterra se fusionaron el año pasado; en la actualidad, son el principal jugador del sector.
Los accionistas de Bunge son BlackRock (9,18% de las acciones), Vanguard Group (13,22%); Capital World Investors (13,40%), entre otros. BlackRock Y Vanguard también son los dueños del litio en el país.
Crisis en la actividad industrial
En febrero, las importaciones alcanzaron el valor de 4.093 millones de dólares, 18,6% inferior a igual mes de 2023. De acuerdo al Indec, los precios descendieron un 6,4% mientras que las cantidades, otro 13%. El dato que da cuenta de la profundidad de la crisis en el sector industrial está asociado a la caída de las importaciones en dos rubros claves: bienes intermedios y piezas y accesorios.
Los Bienes Intermedios registraron una caída del 12,2 por ciento, explicada por una merma en las cantidades adquiridas del 5,2%. Los precios descendieron un 12%.
En el caso de las Piezas y Accesorios, la reducción total fue del 17%, debido a un descenso de 25,1% en las cantidades, mientras que los precios aumentaron 10,5%. Datos de la recesión planificada del Gobierno nacional.
Las importaciones industriales caen al mismo tiempo en que se derrumba la producción local. El Índice de Producción Industrial manufacturero de enero cayó un 12,4% y en diciembre lo hizo otro 12,8%. Para la Unión Industrial Argentina (UIA), este resultado volvería a repetirse en febrero (una vez que se publiquen las cifras oficiales).
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