La empresa petrolera 51% estatal YPF puso a la venta su torre ubicada en Puerto Madero. La compañía petrolera decidió desprenderse del edificio que fue inaugurado en 2008, diseñado por el famoso arquitecto tucumano ya fallecido César Pelli.
Con esta operación, YPF busca recaudar, según cotizaciones del mercado inmobiliario, unos 400 millones de dólares, lo cual mostraría el salto del valor del edificio. En el momento de sus construcción, la obra tuvo un costo de 135 millones de dólares.
Según pudo saber El Destape, la decisión se enmarca en la estrategia de la petrolera de concentrar sus recursos en el core del negocio. Esto refiere a la producción de energía -y financiar con los recursos parte del plan de trabajo-, pero también apunta a engrosar la política de austeridad y gestión eficiente que la firma que conduce Sergio Affronti parece haber adoptado en esta etapa.
La decisión se suma así a otras acciones corporativas que van en el mismo sentido y que pueden ser reconocidas como parte de la transformación que ha impulsado la pandemia de covid-19 en función de las posibilidades que generó el trabajo remoto y de lo costoso de mantener estructuras de importantes dimensiones.
La torre Pelli ostenta 160 metros, 33 pisos y 3 subsuelos que desde su concepción buscó tener diferentes percepciones visuales, donde uno de los gestos arquitectónicos más reconocibles es una intersección de volumen ubicado en su planta baja, entre un cuadrado de lados curvos rotado 45 grados, apuntando uno de sus vértices hacia el centro de la ciudad, con un triángulo, también de lados curvos, con una de sus puntas señalado hacia el río y evocando a la proa de un barco.
Al margen de los detalles, la fachada también resulta icónica porque presenta, con una mayor transparencia en el sector correspondiente, un jardín de invierno con árboles que se ubica entre los pisos 26 y 31 tomando la altura de estos 5 niveles, siendo esta otra de las características diferenciales del edificio.