Carne: Cortes populares bajaron hasta casi 10% en un mes

Un relevamiento oficial en supermercados revela que desde el 28 de junio se registraron descensos en los principales cortes afectados al mercado interno. En promedio la rebaja fue de apenas 0,7% en el último mes. 

03 de agosto, 2021 | 13.27

Los precios de los principales cortes populares de carne afectados al mercado interno, sobre los que se dispuso la prohibición de venderlos en el exterior, registraron en el último mes un importante descenso, alcanzando a casi el 10 por ciento (como en el caso del matambre), aunque todavía el recorte está lejos aún de compensar la suba especulativa del último año.

Según un relevamiento interno del equipo económico entre las principales cadenas de supermercados nacionales incluidos en el plan para bajar el precio de la carne, hubo desde el 28 de junio retrocesos en asado de matambre (-9,7 por ciento), vacío (-7 por ciento), picada especial (-4 por ciento), asado de tira (-2,2 por ciento), entre otros. Por su parte, las negociaciones entre los ministerios de Desarrollo Productivo y de Agricultura con la cadena productiva y comercial para definir un Plan Ganadero de largo plazo llegaron a buen puerto y desde el equipo económico anticiparon a este medio que hubo acuerdo y en breve se anunciarán los puntos principales con miras a incrementar la oferta de carne

En el último año el precio de la carne se disparó un 75 por ciento, con picos de hasta 100 por ciento en algunos cortes puntuales, duplicando la inflación del período (el IPC interanual se ubica en torno al 50 por ciento). Con el objetivo de "reacomodar el mercado ganadero", el Gobierno dispuso el cese de exportaciones de cortes populares, sobre los cuales se aseguró una oferta local a bajo precio, y un cupo de 50 por ciento en la venta externa para el resto y acordara. Los precios en el mostrador recién comenzaron a mostrar algunas bajas en los últimos días de junio, las cuales se fueron consolidando durante el mes siguiente

El precio en el mostrador

"El precio de la carne se ha estabilizado, de hecho ha habido una leve baja. Iremos liberando cupos de exportación en la medida en que veamos que sigue la estabilidad en el mercado interno", aseguró esta semana el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas. El Destape consultó sobre las cifras que justificaron las declaraciones del ministro, dado que la baja se torna imperceptible en la mayoría de las carnicerías tras la escalada del último año y así se accedió a un relevamiento interno entre los supermercados afectados en la oferta de cortes vacunos, que sirven de referencia para las medidas de relajamiento en las exportaciones que podría aplicar el equipo económico. 

En promedio, la rebaja fue de 0,7 por ciento, aunque existe una alta disparidad entre los cortes populares y los premium que se mantienen autorizados a exportar. En algunas carnicerías y para el caso de algunos cortes puntuales hubo una leve baja en el mostrador, aunque no fue generalizada.

Se mantuvieron excluidos de la prohibición de exportar los contingentes arancelarios otorgados por terceros países (cuota Hilton, 481 y otros). En esos 30 días, se dispuso una cuota de exportación equivalente a la cuota de mercado del año 2020. Además se habilitó la exportación de cortes de asado vacuno, quedando prohibidos los del novillo, y el cupo de carne kosher. Los frigoríficos exportadores se comprometieron a incrementar la oferta de los once cortes no exportados a precios acordados en supermercados nacionales, cadenas regionales y carnicerías: asado, vacío, matambre, cuadrada/bola de lomo, paleta, tapa de asado, carne picada, falda, carnaza, roast beef y espinazo.

Según el relevamiento en supermercados al que accedió en exclusiva El Destape, desde junio las principales bajas en los precios fueron para el matambre, con el -9,7 por ciento; el vacío, -7 por ciento; la picada especial, -4 por ciento; el asado de tira, 2,2 por ciento y el cuadril y la tortuguita, con una rebaja de 1,8 por ciento en ambos casos. Luego existe un tándem de cortes que se mantuvieron sin alzas desde el 1 de junio, mientras que siguieron los aumentos en cortes premium, como el bife de chorizo (5,6 por ciento), el bife ancho (2,3 por ciento) y la costilla (1,5 por ciento).

El plan ganadero

Durante las primeras semanas que rigió la prohibición de exportar, el equipo económico intensificó las negociaciones con la cadena agroexportadora para alcanzar un programa de más largo aliento, que permita incrementar la oferta global, tanto la destinada al mercado interno como a la exportación. En las últimas semanas hubo avances y anuncios en esa misma línea. Fuentes oficiales confirmaron a este medio que este fin de semana se cerró el acuerdo sobre el plan ganadero. 

Para el Gobierno, la clave en materia de costos, sigue siendo el precio internacional del maíz y su impacto en el de la carne, para lo cual se analizó la estructura de costos de la cadena y de la incidencia del principal insumo para el engorde del animal. Dado que el plan busca duplicar el peso de faena, los productores requieren de mayor volumen del grano para "cargarle kilos". El programa prevé elevar el peso de los animales llevados a hacienda, pasando del valor actual de 226 kilos para el mercado externo y de 210 kilos para el interno a un valor de referencia general de 430 kilos. 

La semana pasada el ministerio de Agricultura y el Banco Nación lanzaron créditos por 10 mil millones para el "engorde" de ganado, con tasa bonificada, un pedido de los productores en el marco de la negociación con el plan. Con el objetivo de incrementar la producción ganadera y contribuir a la estabilidad del precio de la carne en el mercado local, la línea de crédito permitiría financiar a pequeños y medianos productores ganaderos de todo el país, que podrán destinar los recursos para la adquisición de maíz para el engorde de ganado bovino en corral.

En los próximos días se dará a conocer la letra chica del Plan Ganadero acordado con el Consejo Agroindustrial, el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina y gobernadores. El objetivo de mediano plazo es aumentar la producción de carnes con una meta de 5 millones de toneladas anuales: 3 millones para el mercado interno (que permitiría aumentar el consumo en el mercado interno a más de 70 kilos por año por habitante) y 2 millones para exportación (que implicaría duplicar las exportaciones del último año).