El presidente de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (CICCRA), que nuclea a los frigoríficos, Miguel Schiariti, afirmó que no hay posibilidad de que los precios de la carne bajen y cuestionó el acuerdo con exportadores para vender el alimento a bajo costo.
"Se renueva un acuerdo que en realidad no tiene ningún sentido más que el sacrificio que hacen los exportadores en aportar seis mil kilos de carne mensuales a un plan de promoción publicitaria del Gobierno. Digo esto, porque seis mil toneladas de carne es menos del 3% por 189 mil toneladas de carne que consumimos los argentinos por mes", sostuvo el empresario quien además cuestionó que la carne a precio bajo esté en supermercados y no en las carnicerías de barrio.
En declaraciones a El Destape Radio, el empresario indicó: "Para que la carne esté a un precio accesible los salarios no tienen que estar tan bajos" y agregó que para que bajen los productos alimentarios "lo primero que tenemos que hacer es sacarle el Impuesto al Valor Agregado (IVA)".
Schiariti sostuvo que los empresarios aumentan los precios debido a que suben los costos que son impulsados por la "emisión monetaria" y opinó que el gobierno debería tomar decisiones para lograr confianza.
El empresario afirmó que "es baratísimo comer carne en la Argentina" y comparó la situación con Europa donde los cortes salen "60 euros". Consultado acerca del poder adquisitivo de Argentina y Europa, el referente de la Carne enfatizó que es necesario mejorar los sueldos.
En la entrevista reconoció que un trabajador de la carne cobra entre 60 mil y 80 mil pesos, cifra que consideró bajo. "No lo aumentamos porque no dan los costos", se excusó al decir que los costos aumentaron de forma desproporcionada y que no pueden ser trasladada a precios.
"No hay chance de que baje el precio de la carne. Tengamos en cuenta que es un producto que viaja muchos kilómetros para ir a un frigorífico y el combustible aumentó un 50 por ciento desde octubre. Todo eso es aumento de costo y el impuesto que tienen los combustibles es del 50 por ciento, fijensé si el Estado no podría hacer mucho para bajar los precios", enfatizó.
El empresario argumentó que el Estado debería bajar el Impuesto al Valor Agregado (IVA) para los alimentos, debido a que es regresivo porque lo pagan aquellos que más tienen y los que menos tienen en iguales condiciones. "Los empresarios no somos responsables del aumento, hacemos malabarismos para sostener las empresas en los lugares donde están", afirmó.