"Ningún país" se desarrolló sin un Estado "inteligente, presente y audaz", sostuvo Batakis

19 de junio, 2023 | 13.22

(Por Marcelo Bátiz) La presidenta del Banco de la Nación Argentina (BNA), Silvina Batakis, destacó el rol del Estado en la formulación de políticas económicas al asegurar que "ningún país en el mundo se desarrolló sin un Estado inteligente, presente y audaz" y "sin una política activa en materia de industria".

Batakis resaltó la importancia de una administración inteligente del comercio exterior y criticó la gestión del macrismo en el BNA.

Los siguientes son los principales tramos de la entrevista con Télam.

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- Télam: En tiempos en los que se cuestiona el rol del Estado, ¿cuál es la importancia de la banca pública?

- Silvina Batakis: Muchos vienen a proponer que la Argentina tiene que ser librada al mercado y que la especulación financiera sea la que rija nuestras vidas. En nuestro espacio político, creemos que la industria, el agro, el turismo, la energía, los servicios en general tienen que tener un rol preponderante y, para eso, se necesita una banca fuerte. Ningún país en el mundo se desarrolló sin un Estado inteligente, presente, audaz y sin política activa en materia de industria. Es una industria que tiene que ser 4.0, que tienen que incorporar la inteligencia artificial y estar presente desde el campo científico tecnológico también en el agro, no solamente con la maquinaria agrícola, en la que la Argentina está en la frontera del conocimiento. En eso, la banca pública tiene una responsabilidad tremenda y el Banco Nación, un compromiso muy fuerte.

En banca personal trabajamos mucho en la modernización. Tenemos 14 millones de clientes, que hasta el 2020 operaban con presencialidad, sólo 300.000 trabajaban en forma virtual. Hoy 9 millones trabajan a través de la virtualidad.

- T: Sorprendió a muchos su reciente crítica al exministro de Economía, Martín Guzmán. ¿A qué se debió?

- S.B.: Como dijo la vicepresidenta (Cristina Fernández de Kirchner), hay que decir las cosas claramente. Hubo dos años de gestión con superávit comercial, nos tenemos que preguntar cómo se administró ese superávit y si teníamos que prever qué podía pasar si faltasen dólares. No podíamos prever la sequía ni que hubiese una guerra, está clarísimo, pero la experiencia indica que, cuando uno tiene algo de superávit, tiene que guardarlo, porque es la Argentina. Siempre tenemos estas crisis recurrentes, de las cuales salimos con creatividad y con trabajo, pero me parece que ahí faltó algo de experiencia.

- T: ¿No se le puede objetar que, de esta manera, estaría retaceando insumos para la producción?

- S.B.: No, uno tiene que administrar. No hay ningún país del mundo que no cumpla esa regla. Por eso necesitamos un Estado audaz y eficiente. Hoy, aun sin tener los US$ 20.000 millones que nos faltaron por la sequía, lo que se está haciendo desde el Gobierno junto con el Banco Nación, es otorgar créditos con tasas subsidiadas. Los indicadores hablan de un récord en la utilización de la capacidad instalada. La industria sigue creciendo y eso es resultado de una política. No es casual, no es que el mercado naturalmente va a hacer que la industria crezca; crece porque hay un montón de instrumentos diseñados para eso.

- T: ¿Cómo se explica esa convivencia de dos realidades como una industria que crece y una inflación que no cede?

- S.B.: Mucho tiene que ver con la economía bimonetaria. Hace mucho que todo lo transformamos a dólares, es natural porque la gente tiende a defenderse de la inflación para preservar el ahorro. Cuando vemos que no hay dólares, se generan tensiones cambiarias que llevan a la inflación. Lo que también muestra que la economía sigue el movimiento es la tasa de desempleo tan baja. Cuando se recorren los sectores industriales planificados, los parques industriales en cualquier provincia, dicen que no se consiguen trabajadores. Hay 21 provincias que tienen la tasa de desempleo más baja de la historia. Eso es porque hay una política activa de parte del Gobierno.

Es cierto que es una economía rara. El campo está en una crisis tremenda, tenemos las tasas de inflación en el orden del 7% al 8% mensual y, sin embargo, la industria sigue creciendo y generando puestos de trabajo. Es una cosa atípica que la estudian en el mundo.

- T: ¿Son sostenibles en el tiempo esas dos realidades?

- S.B.: No, pero se espera que el año que viene, sobre todo a partir del segundo trimestre, quizás la balanza comercial empiece a dar resultados apetecibles para lo que la economía que uno quiere desarrollar. Este año, por el gasoducto, va a haber US$ 2.000 millones extras que no hubo el año pasado. Eso nos permite no tener que erogar en el exterior e incluso poder exportar algo. Y hay que sumarles los yuanes que habilitó China.

- T: Los réditos los vería la próxima administración.

- S.B.: Hay continuidad de Estado. Esperemos que el año que viene sea bueno y que no venga alguien a destruir eso. Si queremos a alguien que lleve la economía a un libre mercado y a la especulación, claramente vamos a destruir puestos de trabajo, como pasó en la gestión anterior. Desde 2003 hasta 2015 se crearon aproximadamente 20.000 pymes por año y, en la gestión del macrismo, se destruyeron 26.000. Actualmente se logró recuperar esas pymes. En ese sentido, hay un objetivo de hacer crecer el empleo y las exportaciones, con un Estado presente y creo que la gente va a votar eso.

Con información de Télam