Sentados en una montaña de pesos, los bancos están ganando como nunca

El Fondo Monetario impones que la tasas de interés reales sean positivas frente a los precios, atizando los precios. 

31 de agosto, 2023 | 00.05

Entre otras medidas que impone el Fondo Monetario Internacional, contradictorias a los supuestos objetivos que espera de la Argentina y que fogonea la inflación, es el mantenimiento de tasas de interés reales positivas frente a los precios, lo que en un contexto de inflación de tres dígitos es una herramienta que comienza generar más costos que beneficios. Al menos para la economía real. No así para los bancos. La necesidad de reducir la base monetaria vía licitación de letras con tasas de interés cada vez más altas obliga a emitir para pagar esos rendimientos, mientras tanto los bancos la ven pasar y solo se quedan con su parte de la rentabilidad. 

El BCRA mantuvo sin cambios las tasas de interés de referencia a lo largo de julio, dada la desaceleración de la tasa de inflación en junio. En particular, la tasa de interés de política monetaria (LELIQ 28 días) permaneció en 97 por ciento nominal anual (154,9 por ciento efectiva) y en términos reales se mantuvo en terreno positivo tanto respecto de la inflación observada como esperada por el mercado. Para los bancos es un excelente negocio, porque ningún proyecto de la economía real puede generar ese diferencial y, además, libre de riesgo.

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El desarme de este cúmulo de letras y notas de liquidez, que asciende actualmente a 13,9 billones de pesos, debería ser una prioridad para la próxima administración. "En lo que refiere a los instrumentos remunerados, a precios constantes, las colocaciones a plazo fijo en pesos del sector privado registraron una leve contracción en julio, aunque persisten en torno a los valores máximos de las últimas décadas en términos del Producto", señaló el último informe monetario.

La contracara es que los préstamos registraron una contracción mensual adicional a precios constantes y sin estacionalidad, dinámica explicada por los préstamos al consumo y aquellos con garantía real. En tanto, los préstamos destinados a financiar actividades comerciales mantuvieron su saldo estable en el período bajo análisis.

Sin embargo, es un circulante que podría estimular la actividad y el consumo sin un costo fiscal extra al que pide el Fondo.La forma más efectiva y virtuosa de salir de este atolladero es reactivar la demanda de pesos y que esa liquidez se vaya del Banco Central a los bancos para que empiecen a colocar crédito a las empresas; algo que se hizo en 2010 por un problema similar. La diferencia es que en ese momento la tasa de interés implícita era de 12,7 por ciento anual. 

Otra alternativa es crear un fideicomiso que permita acercar el financiamiento de mediano y largo plazo a los hogares. Una tercera opción es disponer la elevación de los encajes bancarios, a fin de que las entidades bancarias los constituyan con la integración de las Letras de Liquidez (Leliq) a fin de bajar el costo financiero nacional, evitar futuras corridas bancarias y recuperar el crédito para todos los argentinos Por lo pronto, para los bancos es un gran negocio. En los últimos doce meses el sistema financiero obtuvo una ganancia de 1,3 billones de pesos, pero por "títulos valores" el ganancia fue de 11,4 billones de pesos y 2,1 billones por "primas de pases".

En pala y a la Bolsa

En su balance presentado hace unas semanas ante la Bolsa, el banco Santander informó para el primer semestre El primer semestre de 2023 de Santander Argentina obtuvo un beneficio neto ajustado por inflación de 68.611 millones de pesos, implicando un 4 por ciento de crecimiento en términos reales respecto del mismo período del 2022 y un retorno del 22,2 por ciento sobre el patrimonio promedio.

A partir del ejercicio 2021, el ajuste por inflación correspondiente se imputa 100 por ciento en el período fiscal en que se origina. Los ingresos operativos netos totalizaron 345.316 millones de pesos, representando un crecimiento del 31 por ciento en términos reales respecto a los resultados del primer semestre de 2022.  En este rubro, los mayores ingresos fueron por intereses de títulos de deuda (427.767 millones de pesos), por encima de los recibidos por préstamos. 

El Grupo Financiero Galicia informó un resultado también real neto de 80.409 millones de pesos, frente a los 24.175 millones de igual semestre del 2022. Por su parte, el BBVA obtuvo en el primer semestre un resultado neto antes de impuestos de 75.556 millones de pesos, el equivalente al doble de igual período de 2022 (32.761 millones). 

"Los presentes estados financieros intermedios consolidados condensados exponen cifras expresadas en pesos argentinos en términos de poder adquisitivo al 30 de junio de 2023 y se redondean al monto en miles más cercano", señala el balance. El mayor salto se dio en títulos de deuda a valor razonable con cambios en resultados, de 38.453 millones en diciembre último a 80.225 millones. 

En el caso del Superville, pasó en el segundo trimestre a una ganancia de 6954 millones de pesos luego de un pérdida de 4432 millones en el primer trimestre. El mayor ingreso fueron  17.873 millones de pesos en instrumentos financieros. El HSBC obtuvo su mejor desempeño en un lustro 123.401 millones de pesos en el primer semestre de este año frente al mismo período de 2022 (60.286 millones), de 2021 (40.181 millones) y 2020 (68.230 millones). En este caso, triplicó el resultado neto por medición de instrumentos financieros 6301 millones de pesos a 22.510 millones.