En línea con los estímulos para que los ahorristas y sojeros mantengan sus pesos, el Banco Central volvió a aumentar la tasa mínima de los plazos fijos, hasta el 30%. Para asegurarse de resguardar las resevas internacionales, además, en la noche del jueves restringió el acceso al dólar para empresas.
A través de la Comunicación A 7027, a partir del 1 de junio los bancos deberán ofrecerle a cualquier persona o compañía, sin importar el volumen, una tasa nominal del 30,02% anual como piso. Las únicas excepciones serán las empresas que accedieron a los préstamos subsidiados del 24%, ya que estos sólo los entregaron para casos de extrema necesidad y no para favorecer una bicicleta financiera.
El 17 de abril, el Central obligó a las entidades bancarias a pagar una tasa mínima del 26,6%. También forzó a que pongan a disposición la opción de ajustables por UVA más 1% a 90 días y precancelables, que garantizan que los ahorros mantengan una tasa positiva sobre la inflación.
Además, hoy el BCRA les agregó la posibilidad a los productores agropecuarios de realizar depósitos a tasa variable, ligados a la cotización del dólar. Esta abarca un importe de hasta 2 veces el valor total de las ventas de granos registradas desde el noviembre del año pasado. Esta opción se suma a la que habilitó semanas atrás atadas a los precios de cereales y oleaginosas.
En la noche del jueves, la autoridad monetaria restringió a que compren dólares por el mercado oficial a las empresas que hayan acumulado estos billetes. "Las empresas que cuenten con activos líquidos originados en la formación de activos externos deberán disponer primeramente de esos recursos para el pago de obligaciones con el exterior", indicó el organismo que preside Miguel Pesce.
En un comunicado, la autoridad monetaria dispuso "nuevas medidas para el acceso de las empresas al Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) con el propósito de ordenar el pago de obligaciones por la importación de bienes". De esta forma, obliga a las empresas importadoras a utilizar los dólares ya disponibles antes de comprar más divisas con el fin de cancelar los compromisos por compra de productos o insumos.
Las decisiones coincidieron con un acercamiento de posiciones entre el ministro de Economía, Martín Guzmán, y los principales acreedores de los bonos en moneda extranjera bajo ley estadounidense. El funcionario mejoró la propuesta inicial, pero aún queda diálogo para ajustar la sintonía de los bonistas, tal como aclaró el economista y algunos tenedores de deuda el jueves.
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