El ministro de Economía y candidato a la Presidencia en las elecciones 2023, Sergio Massa, le indicó a Silvina Batakis, la presidenta del Banco Nación (BNA), que separe del cargo a María del Carmen Barros, gerenta general de la entidad, quien había quedado en el ojo de la tormenta tras contratar a una famosa numeróloga para una consultoría.
Barros había quedado envuelta en un escándalo luego que trascendiera mediáticamente que cobra un sueldo de 9 millones de pesos y que había contratado a Verónica Laura Asad, conocida como “Pitty, la numeróloga”, para un coaching por $1.800.000 y por la designación de Héctor Javier Silva, ex marido de Batakis, en el cargo de Gerente de Sistemas del BNA, y de Juan Pablo Pedemonte, hijo de Barros, al frente de una gerencia en la casa matriz del banco.
Por todo ello, Barros salió eyectada de la entidad después de una reunión que mantuvieron este lunes Batakis y Massa. “Le pidió la renuncia de la gerenta”, hizo trascender el entorno de Massa después de su encuentro con Batakis. "No hay lugar para este tipo de situaciones", le agregaron a este portal, apenas un día después de que Massa pidiera públicamente que Martín Insaurralde renunciara a su candidatura en Lomas de Zamora, luego que se conociera su viaje de lujo en Marbella con una modelo hace solo unas semanas.
“No podemos tener otro tema vinculado a la corrupción”, le habría comunicado Massa a Batakis. El fin de semana trascendió que el Banco Nación le inició un sumario a Barros por el caso de Pitty la numeróloga y otras contrataciones. En el banco aseguraron que detrás del caso –que sacó a la luz un informe del programa Periodismo para Todos (PPT)– está “la mano de la cerealera Vicentin”.
Luego que se hizo público el caso, la diputada nacional Graciela Ocaña realizó una denuncia ante el juzgado federal 9, a cargo de Daniel Rafecas, quien giró la denuncia al fiscal Guillermo Marijuan. Éste, a su vez, ordenó el allanamiento del banco e imputó a Batakis y a Barros, por los delitos de incumplimiento de los deberes de funcionario público, defraudación contra la administración pública, administración fraudulenta y peculado y dispuso una serie de medidas de prueba.
Diputados opositores presentaron un pedido de informe por la contratación de “Pitty". En el entorno de Batakis señalaron que el directorio del Banco “desconocía completamente” la contratación de Asad, “por tratarse de competencias de la gerencia” y que por eso se instruyó al área de legales a iniciar “un sumario a la gerenta general, Maria Barros”.
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