Los préstamos al sector privado se desaceleraron en mayo y la mayoría de las líneas reflejaron caídas en términos reales. Debido a la suba de tasas que aplicó el Gobierno, también aumentó la cantidad de aperturas de plazos fijos.
Al observar el informe monetario del Banco Central (BCRA), el 2022 continua posicionándose como uno negativo para los préstamos en pesos, siendo mayo el quinto mes consecutivo con contracción en términos reales (-0,5%). Sin embargo, en términos anuales, se expandieron un 2,3% real, posiblemente explicada por las bajas bases de comparación del mismo mes del año 2021.
Los préstamos a las empresas volvieron a ser la única categoría con crecimiento real en el mes, aunque se expandieron a una tasa marginal del 0,5%. Esta dinámica estuvo totalmente impulsada por los Adelantos (+3,6% real). En términos anuales, los préstamos a las empresas crecieron un 13% real.
En tanto, los créditos al consumo continúan con una dinámica contractiva: -1,5% real en mayo, por caída tanto de los préstamos personales (-1,4% real) como del financiamiento con tarjeta de crédito (-1,6% real). En términos anuales, los préstamos al consumo acumulan 12 meses consecutivos de caídas con un 7% real en mayo.
En mayo, los créditos con garantía real se mantuvieron casi estables, con una caída marginal del 0,6% m/m real. Estuvieron impulsados por la caída en préstamos hipotecarios, los cuales se contrajeron un 2,8% m/m real y no lograron ser compensados por los prendarios, que crecieron un 2% m/m real.
Actualmente, los préstamos representan apenas un 60% del valor de mayo 2018, último pico antes de la crisis financiera que afectó al país. Como veníamos señalando, se había comenzado a observar cierta recuperación de los mismos a partir del mes de septiembre pasado, que en enero se frenó. Quedará por ver si se aplicaran a futuro nuevas políticas de impulso crediticio como política para apuntalar la recuperación
En lo que va del año, los préstamos en pesos acumulan una caída del 7,2% en términos reales, mientras que los depósitos privados se contrajeron 7%, dos puntos por encima de la caída observada en el mismo periodo para el año 2021.
Actualmente, los préstamos representan apenas un 60% del valor de mayo 2018, último pico antes de la crisis financiera que afectó al país.
Plazos fijos y depósitos
Por primera vez en el año, hubo un incremento en términos reales de los depósitos privados del 1,2% intermensual. En términos anuales, mayo fue el octavo mes consecutivo con aumento en términos reales (+2,5%).
Al interior, los depósitos a la vista aumentaron un 2% real, impulsados tanto por las cajas de ahorro como por las cuentas corrientes (+2,2% y +1,8%, respectivamente). Respecto a un año atrás, crecieron un 4,6% real.
Por su parte, los plazos fijos continúan con una dinámica positiva, luego de haber crecido un 1% real en mayo. Según un reporte de la consultora LCG, al igual que en los meses anteriores, esta evolución volvió a estar explicada totalmente por las colocaciones mayoristas, las cuales crecieron un 1,8% (aportando un 87% del crecimiento nominal del mes) y actualmente están representando casi un 78% de las colocaciones totales. En lo que va del año, este tipo de colocaciones llevan acumulado un crecimiento real de casi el 12%, incrementando su participación sobre el total de colocaciones en 4 puntos.
Dentro de las colocaciones a plazo, los ajustables UVA se destacaron como los más dinámicos (+5,5% real en abril), desacelerando en 5,3 puntos respecto a la variación del mes de abril. Sobre el total de crecimiento de los plazo fijos en el mes, terminaron aportando un 7%, aunque ganando mucho más terreno en el caso de los minoristas.
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