La ampliación presupuestaria decretada hoy por el Gobierno nacional se destinará en un 70% a jubilaciones, salarios, programas sociales y subsidios, en tanto que el 30% restante reforzará partidas de políticas públicas, con un ajuste del déficit primario que se estima bajará del 4,3% previsto inicialmente al 3,5% del Producto Bruto Interno, según se informó.
"La nueva adecuación presupuestaria actualiza créditos para gasto primario en $1.215.000 millones, con lo cual prevemos una mejora del déficit primario, que cerrará este año en torno al 3,5% en comparación con la previsión inicial del 4,3%", señaló a Télam una fuente de la Secretaria de Hacienda.
Tras explicar al detalle las nuevas partidas asignadas a los distintos rubros, se aclaró que esta ampliación "refleja decisiones que se tomaron durante todo el año, que incluyen actualizaciones de jubilaciones y pensiones, incrementos de programas sociales y acuerdos cerrados en las paritarias".
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En cuanto al refuerzo destinado a la inversión pública, aclaró que esos $300.000 millones adicionales reforzarán "todas las acciones vinculadas con la inversión pública, incluyendo alrededor de $80.000 millones para gastos corrientes".
Toda esta estructura se encuentra financiada "parcialmente" por una mejora en el cálculo de la recaudación impositiva, que a partir de "julio se comportó mejor".
"La otra parte del financiamiento se hará con previsiones para endeudamiento, ya sea a través del mercado o del Banco Central", explicaron en la Secretaría de Hacienda.
Respecto de una reformulación de las partidas presupuestarias en función de subejecuciones en distintas áreas del gobierno, se admitió que algunas de ellas "encontraron dificultades o demoras y sufrieron reprogramaciones. Por ejemplo hay una disminución en el Ministerio de Transporte por demoras en la ejecución", precisaron las fuentes consultadas.
Con información de Télam
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