El country manager de Enel Argentina, propietaria de la distribuidora Edesur, Claudio Cunha, expresó que la compañía está "trabajando junto a las autoridades para conseguir los fondos que les permitan hacer frente a las obras” que deberá llevar adelante en los próximos 180 días en 12 distritos del sur del conurbano bonaerense, tal como lo dispuso el Gobierno nacional.
Cunha se refirió al reciente anuncio que demandará una inversión de $ 7.000 millones en ocasión de que la compañía distribuidora presentara al mercado local su balance del primer trimestre 2023, en el que se precisa que invirtió $7.290 millones en el primer trimestre del año, a pesar de haber obtenido un resultado operativo fuertemente negativo.
El lunes, el ministro de Economía, Sergio Massa, dio a conocer un plan de obras de energía eléctrica identificadas por el interventor Jorge Ferraresi que Edesur deberá llevar adelante en 12 partidos del conurbano bonaerense, con el objetivo de resolver los cortes de suministro en amplios sectores de la población de la zona sur del área metropolitana ante los picos de demanda invierno y verano.
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El plan consiste en 278 obras en los municipios de Florencio Varela, San Vicente, Presidente Perón, Ezeiza, Esteban Echeverría, Quilmes, Cañuelas, Avellaneda, Lomas de Zamora, Berazategui, Lanús, Almirante Brown.
Al respecto, Cunha expresó que “están trabajando junto a las autoridades para conseguir los fondos que les permitan hacer frente a las obras necesarias”.
Según el comunicado de prensa emitido por la compañía, las tarifas otorgadas por el Ente Nacional Regulador de la Electricidad fueron diferidas a los meses de abril y junio, lo que resultó insuficiente para hacer frente a la operación de la compañía e incrementar las inversiones.
No obstante, Edesur logró aumentar su demanda acumulada de energía eléctrica en un 21% con respecto al mismo período del año anterior, alcanzando los 5.938 GWh en el área de concesión.
En cuanto a los indicadores financieros, la empresa destacó que el resultado del período fue un 47% mayor que el mismo período del año anterior debido al menor impuesto a las ganancias y mayores ingresos financieros netos.
Sin embargo, la deuda neta empeoró con respecto a diciembre del año anterior debido a los menores saldos de inversiones corrientes.
“Los ingresos registrados durante el primer trimestre 2023 alcanzaron los 47.708 millones de pesos, producto del incremento del 13,5% en la energía vendida en términos físicos. Cabe destacar que, a pesar de los ajustes tarifarios aplicados en el período, los mismos se encuentran por debajo de la inflación que en el interanual alcanzó 104,3% en marzo”, señaló el comunicado de la empresa.
El EBITDA del primer trimestre de 2023 arrojó una pérdida de 11.932 millones de pesos, producto de que el incremento en los costos operativos al ritmo de la inflación fue superior al incremento de los ingresos.
Con información de Télam
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