La producción y exportaciones argentinas de bebidas crecieron en 2021, impulsadas por el segmento sin alcohol, indicó la consultora Investigaciones Económicas Sectoriales (IES) en su Informe Económico Semanal.
En 2021, la producción conjunta de bebidas volvió a crecer anualmente, con una suba de 3,3%, aunque ello respondió esta vez al impulso del sector de bebidas sin alcohol, precisó el trabajo.
El segmento de bebidas gaseosas, cervezas y bebidas espirituosas verificó una expansión anual de 8,7%, según el Indec, aunque aún se mantiene en un nivel menor al de 2018, aclaró IES.
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Por su parte, las exportaciones de bebidas totalizaron US$ 1.045,8 millones, el mayor valor en siete años, con un aumento de 8,3% con respecto al año previo, en este caso por la buena performance de los vinos.
En cantidades, los despachos al exterior de bebidas cayeron 14,2% por las menores exportaciones de vinos a granel y mostos; pero, a pesar de los menores volúmenes exportados, creció fuerte el precio medio por las ventas de vinos de mayor calidad.
Así, las exportaciones de vinos tuvieron una caída de 16,5% en volúmenes en 2021 pero suba de 4,7% de los varietales; mientras que, en valores, registraron un incremento de 10,1% y totalizaron unos US$ 843,2 millones en el año.
En tanto, la producción de vinos verificó una merma anual de 3,5% y las ventas internas de vino cayeron 11,3% afectadas por la merma del 17,2% de los vinos sin identificar (65,5% de participación).
En cambio, las ventas de bebidas sin alcohol crecieron 10,7% respecto de 2020, aunque el consumo del segmento se ubica 25% por debajo del nivel de ingesta de una década atrás, y permanecerá en bajos niveles en 2022, lejos de los niveles.
Por su parte, los despachos de cerveza al mercado interno verificaron un incremento de 3,1% en 2021; impulsados por la apertura parcial de bares, que fortalecieron la recuperación del consumo en el año, por lo que recuperaron lo perdido en 2020.
En cambio, las ventas internas de vino cayeron 11,3% en 2021; sin embargo, el consumo de vinos varietales se mantuvo estable en altos niveles en 2021, tras el récord de consumo alcanzado en 2020, con exportaciones récord en el segmento varietal.
En otro orden, en 2021 se importaron bebidas por US$ 91,3 millones, con un alza anual del 17,8%, mientras que en volúmenes cayeron 14,5%.
Según IES, la elaboración de bebidas gaseosas, cervezas y bebidas espirituosas permanecerá estable en los meses venideros, mientras que la producción de vino dependerá de la vendimia de 2022, afectada por factores climáticos.
Y, tras el repunte del consumo masivo y de bebidas en 2021, el consumo agregado permanecerá estancado en 2022, con el consecuente impacto en el gasto de las familias en el sector de bebidas.
Con información de Télam