Tan solo un cuarto del precio final que paga el consumidor por un alimento que llega a la góndola del supermercado irá a parar al productor. El resto se pierde en la cadena, entre los intermediarios, fábricas y el comercio. El enorme poder de mercado de los oligopolios permite que la brecha entre las dos puntas haya sido de 5,6 veces en octubre, de acuerdo a los datos de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Las diferencias se deben a un conjunto de comportamientos. Algunos son especulativos, adoptados por diferentes actores de la cadena de valor que abusan de su posición dominante en el mercado. Esto caracteriza básicamente a los hipermercados, los galpones de empaque y cámaras de frío. También impactan factores como la estacionalidad, que afecta a determinados productos en algunas épocas del año, además de las adversidades agroclimáticas. Por último, los costos de almacenamiento y transporte hacen variar este indicador.
El consumidor pagó, en promedio, 5,6 veces más de lo que cobró el productor por esos alimentos, lo que implicó un leve descenso contra los 5,9 de septiembre, precisó el informe de Economías Regionales de la cámara patronal nacional. La participación del productor en el precio final se ubica en el 25,7%.
Si se tienen en cuenta las estacionalidades de los productos, la mejora mensual del índice fue impulsada por un aumento del 16,6% en los precios en el campo, mientras que los afrontados por los hogares subieron 8% en los comercios pymes de cercanía y 8,9% en los hipermercados.
Ahora, si se desmenuza el alza en las góndolas, CAME advirtió que estas fueron mucho más pronunciadas en los hipermercados que en los comercios pymes. Esto destaca la remarcación especulativa por su poder de mercado.
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Los datos surgen del Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) en base a los precios de origen de las principales zonas de producción y a más de 700 precios de cada producto en destino. Son relevados no sólo en verdulerías y mercados por un equipo de 30 encuestadores, sino también mediante un monitoreo de los precios online de los principales hipermercados del país, durante la segunda quincena del mes. En el IPOD frutihortícola, la brecha promedio se ubicó en el 6,3 veces. El del ganadero fue de 2,99 veces.
En octubre, la mayor brecha entre precio de origen y destino se dio en el limón, con una diferencia de 19,7 veces, con lo que amplió de septiembre (15,4 veces). Le siguió la zanahoria (10,8 veces), mandarina (10,5 veces) y naranja (10,1 veces). Los productos con menores brechas, en tanto, fueron: pollo (1,6 veces), huevo (2,2 veces), frutilla (2,3 veces) y repollo (2,4).
La tierra, para quien la trabaja
Semana y media atrás, el Congreso dictaminó positivamente el proyecto de ley de tierras, por lo que está en condiciones de ingresar al recinto de la Cámara Baja, la primera instancia en que será debatida en pleno. “Es un primer paso para nosotros, que lo venimos peleando hace muchos años”, dijo a El Destape Agustín Suárez, referente nacional de la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT).
La iniciativa apunta a poder dar créditos para la compra de tierras a pequeños productores, que mientras están privados de invertir en lotes que deben abandonar a la finalización del alquiler tras dos o tres años. Esto también complejiza su vivienda, que en muchos casos se trata de ranchos o casillas, ya que construir una casa también implica cedérsela al propietario del terreno cuando se consume el contrato.
“Este proyecto es para producir más y mejor alimento y mejorar las condiciones de vida y el trabajo de cientos de campesinos”, describió Suárez. Por eso, el integrante de la UTT confió: “Creemos que tiene que aprobarse. Nos parece algo justo y necesario para un sector que produce alimentos para millones y millones de personas”.
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