El ajuste de US$ 60.000 millones que pidió el presidente Javier Milei que realicen las provincias el próximo año, como parte de su política de “achicar el Estado para engrandecer a la sociedad” parafraseando a un slogan de la dictadura, implicaría una reducción del gasto de casi el 60% en el conjunto de las provincias.
“A los gobernadores les digo: cumplir el compromiso de bajar el gasto público consolidado a 25 puntos del PBI requiere que las provincias en su conjunto hagan un ajuste adicional de 60 mil millones de dólares”, dijo Milei en su discurso de presentación del Presupuesto 2025 en la Cámara de Diputados.
Este proyecto lo hacemos colectivamente. Sostené a El Destape con un click acá. Sigamos haciendo historia.
El PBI para el próximo año, con la recuperación de la recesión que atraviesa aún hoy la economía, está estimado en unos US$ 700 mil millones por lo que el ajuste que planteó el Presidente equivale a 8,6% del PBI. El gasto público de las provincias está estimado en la actualidad en 15,3% del PBI y hacer un recorte de US$ 60.000 millones sería equivalente a una reducción de 57% en el conjunto de las provincias, que además se tienen que hacer cargo de gastos que Nación dejará de hacer, como las obras públicas o garantizar el gasto en educación.
La cifra expresada por Milei solo es concebible como expresión de la mala fe con la que fue elaborado el Presupuesto 2025. El compromiso de bajar el gasto público al que se refirió Milei fue incluído como uno de los puntos del Pacto de Mayo que firmaron 17 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y que “…el compromiso a una rediscusión de la Ley de Coparticipación Federal de Impuestos para terminar para siempre con el modelo extorsivo…” según recuerda el proyecto presentado ayer.
Por lo que, si el ajuste que propuso se tiene que distribuir entre las 17 provincias, directamente implicaría cerrar las administraciones provinciales.
En el mismo texto del mensaje del Presupuesto figuran cifras que convierten en ridículo el discurso presidencial, cuando relata la “Perspectivas para el año 2025” en la página 75. Ahí proyecta “un resultado financiero de equilibrio para el Consolidado de las 24 jurisdicciones, mejorando así el déficit del 0,1% del PBI del año 2024”.
Señala que “los recursos tributarios de origen nacional y provincial en conjunto representarían el 12,4% en 2025 respecto de PBI, por impacto directo del comportamiento preponderante de los recursos de origen nacional que equivaldrían al 7,5% del PBI” y “con un menor impacto, pero siempre positivo, los recursos de origen provincial representarán un 5% del PBI, y los recursos no tributarios serán los de menor impacto con un 0,8% del PBI”.
Con recursos totales por 12,4% del PIB, Milei plantea un ajuste de 8,6%.
MÁS INFO
El mismo texto plantea que “el gasto total se proyecta un crecimiento real del 5,8%, donde se destaca el incremento en los gastos de consumo del 4,1%, incluyendo la partida de Personal, y una recuperación del gasto de capital del orden del 10,3% que impactaría en el desarrollo de programas y proyectos de obras públicas destinados a mejorar la infraestructura provincial”. En cuanto a los servicios de la deuda, estima que serán por $ 6,2 billones de los cuales el 72,8% corresponde a amortizaciones y el 27,2% a intereses, que representan 5,2% de los ingresos corrientes.
Más del 80% de la deuda de las provincias se encuentra denominada en moneda extranjera y del 81,3% de los servicios que deberán afrontar en 2025 corresponden a títulos públicos emitidos tanto en los mercados local e internacional, de los cuales el 56,9% están denominados en moneda extranjera (títulos públicos y organismos internacionales de crédito). El Gobierno les advirtió: “La evolución del tipo de cambio será determinante en la evolución de estas cifras”.
Además, adelantó que no existirá más el Fondo Fiduciario para el Desarrollo Provincial, con la idea de que Nación ejecutará a fin de este año todos los financiamientos y refinanciaciones vigentes.
“La evidencia científica muestra que los países que tienen estados más chicos son más pobres que los países que tienen estados más grandes, es decir que ya las ideas de Milei parten de digamos de un pensamiento errado que no tiene evidencia científica que lo avale”, dijo Alfredo Schclarek Curutchet, profesor Universidad Nacional de Córdoba e investigador Conicet.
“Y menos que menos hay algún tipo de evidencia científica que indicara que si los estados provinciales hacen ese ajuste de 60 mil millones de dólares o del 11% del PIB, que eso sería algo positivo. No hay ninguna evidencia que muestre eso, ninguna evidencia científica”, insistió.
Schclarek Curutchet afirmó que “la evidencia científica muestra que hacer un ajuste de ese tipo implicaría que la economía se destruiría” y señaló que después de ese ajuste “la gran pregunta es qué va a pasar con la educación de la población argentina porque achicar el estado significa menos docentes, peor pago y por ende menos educación pública”.
“Hay muchísima evidencia científica que muestra que los países que se vuelven ricos, se vuelven ricos porque aumenta la educación de su población y acá Milei está planteando directamente destruir la educación pública, con lo cual lo que se está planteando es destruir las posibilidades de que la economía argentina salga para adelante”, aseguró.