Luego de detectarse un incremento injustificado en el volumen de importaciones, cuyo fin era anticiparse a una devaluación, se intensificaron los controles sobre las operaciones de triangulación de las compras el exterior y el festival de cautelares para sortear las restricciones cambiarias. El año pasado los operativos vinculados con este tipo de maniobras generaron cargos y multas por 1018,4 millones de dólares, siendo los rubros más significativos sobre los que recayeron tales acciones: minería, productos agropecuarios, bienes de capital, insumos médico-sanitarios y agroquímicos, entre otros, de acuerdo con un informe de gestión realizado por la Aduana.
En un documento interno que compara la tarea llevada a cabo por el organismo entre la primera y segunda parte del año, buscando mostrar la impronta Guillermo Michel a cargo de la Aduana desde fines de junio, sostiene que el volumen de multas y cargos aplicados se incrementó en un 667 por ciento entre ambos semestres.
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En el comparativo no solo se destaca un cambio en la gestión sino también la implementación de un nuevo sistema de autorización para el acceso a dólares con destino a la importación, lo que, por ejemplo, explica que se desistieran reclamos judiciales por el equivalente a 2600 millones de dólares derivadas de 3146 medidas cautelares solicitadas por empresas durante la vigencia del Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones (SIMI) para el período 2021/2022. Este fue reemplazado por el Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA).
“Con relación a la sobre y subfacturación, es dable destacar que en el marco de las acciones de valoración de operaciones de comercio exterior que desarrolla la Dirección General de Aduanas, se diseñó una estrategia de fiscalización sistémica de valor, basada en análisis de riesgo, tendiente a detectar en forma masiva operaciones con potenciales desvíos”, explicaron desde Aduana.
El análisis radica principalmente en la sobrefacturación de importaciones y en la subfacturación de exportaciones. Estas maniobras tienen el objetivo de constituir activos financieros en el exterior (moneda extranjera) aprovechando la brecha cambiaria. Dentro de los parámetros establecidos se tuvieron en cuenta operaciones de triangulación nociva, ventas sucesivas donde el tercer operador carece de sustancia económica, antecedentes de cargos de valor, denuncias efectuadas anteriormente, índice general de riesgo de las empresas, porcentajes de alícuotas de derechos aplicables, entre otros parámetros.
Los resultados
Los resultados de los mayores controles en la segunda parte del año, muy comprometido por la falta de divisas en el Banco Central, se reportaron más de 33.000 acciones de fiscalización que involucran tanto cargos suplementarios como denuncias contenciosas y penales. Durante el primer semestre del año 2022 se analizaron 14.134 operaciones por un monto FOB total de 896,4 millones de dólares, aplicando cargos suplementarios y multas por 132,7 millones de dólares.
“Estas acciones fueron incrementadas de manera sustancial durante el segundo semestre”, remarca el informe de la entidad que preside Michel desde la segunda parte del 2022. Las operaciones analizadas se duplicaron (33.150 operaciones) y el monto FOB de las operaciones se incrementaron en un 430 por ciento hasta alcanzar los 4747,4 millones de dólares. Asimismo, los cargos y multas aplicadas ascendieron a 1018,4 millones de dólares, con un incremento respecto el semestre anterior del 667 por ciento.
En esos operativos hubo “perlitas” de abuso de la legislación para sortear los controles cambiarios dignas de ser consignadas. “Merece una especial mención los resultados obtenidos en la fiscalización de las operaciones de importación que ingresaron al amparo del Decreto 330/20 que establecía derechos de importación del 0 % en forma excepcional para mercadería a ser destinada a combatir el COVID (barbijos, termómetros, guantes de latex)”, señalan desde el organismo. También hubo denuncias penales por importaciones de maquinaria e insumos para la industria petrolera radicada en Vaca Muerta con importantes sobreprecios, y las presentaciones efectuadas sobre máquinas tragamonedas y máquinas usadas para minar criptomonedas.
Estos ejemplos encuentran un denominador común: la triangulación comercial nociva, que impacta en el egreso indebido de divisas. La maniobra implica operaciones comerciales con facturas de compra emitidas desde Estados Unidos fundamentalmente. También se encuentran, en menor medida, facturas desde otras jurisdicciones como ser Hong Kong, Uruguay y Panamá. La adopción de acciones de control en el ex post, ha contribuido a mejorar la declaración de los elementos que hacen al valor en aduana y el cumplimiento de las normas y procedimientos inherentes a la valoración, a prevenir el fraude y disuadir conductas inapropiadas y a alcanzar una mayor eficiencia en la gestión desplegada por las áreas de valoración.
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