Brasil aprobó el protocolo sanitario para el ingreso a su mercado de la variedad trucha arcoiris que se produce en la Argentina, principalmente en la región patagónica, y es uno de los productos provenientes de la acuicultura nacional, informó hoy la Secretaría de Agricultura.
"Nos da gran satisfacción haber podido lograr un nuevo hito en el desarrollo de la acuicultura argentina. Iniciamos este camino en 2020 construyendo las herramientas para la expansión de la actividad, y hoy ya estamos camino a la apertura de numerosos mercados", destacó el subsecretario de Pesca, Carlos Liberman.
A través de un comunicado, sostuvo que "para la Argentina, Brasil es sin duda un destino que proyectará gran cantidad de divisas y puestos de trabajo".
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Por su parte, el director de Acuicultura, Guillermo Abdala Bertiche, subrayó el logro de “reposicionar la actividad acuícola como fuente generadora de alimentos de calidad, divisas y trabajo en todo el territorio nacional".
"Hoy podemos celebrar este tipo de medidas porque hemos confiado que este sector era posible que crezca, y sustentablemente", afirmó el funcionario, quien puntualizó “la enorme labor de los productores, autoridades provinciales, el Senasa, la Comisión Asesora Técnica para la Acuicultura y un conjunto de actores, que hacen que hoy la actividad pueda crecer y generar un nuevo esquema de proyección en términos productivos".
El proceso de apertura fue iniciado el 7 de enero de este año, con el envío de la solicitud de los requisitos sanitarios y condiciones de acceso al mercado brasileño para el consumo humano de trucha y subproductos oriundos de la acuicultura, en las presentaciones de enfriados o congelados, corte mariposa o entero eviscerado.
Luego de intercambios técnicos entre Cancillería, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y la Dirección Nacional de Acuicultura junto con sus pares de Brasil, se lograron ajustar los requisitos y condiciones entre ambos países, y se alcanzó un acuerdo mediante el cual se aceptó un nuevo modelo de certificado sanitario internacional, para la importación de pescados y productos derivados de la acuicultura, y así el mercado brasileño se sumó al de Japón.
La acuicultura nacional comenzó a potenciarse a partir de 2020 con la creación de la primera Dirección Nacional de Acuicultura y la implementación del Fondo Nacional Acuícola, y actualmente es un rubro que se lleva adelante en 14 provincias del país.
Se trata de una actividad que duplicó su volumen y mercados en los últimos dos años y medio, con exportaciones que se multiplicaron en 2022 y con una proyección que busca alcanzar más de 50.000 toneladas en pocos años.
Con información de Télam
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