El jefe de Gabinete, Juan Manzur, exhortó este lunes a los integrantes de la Comisión de Presupuesto y Hacienda a aprobar el proyecto de ley de acuerdo con el FMI "para fortalecernos y protegernos ante el sombrío escenario global que acabo de referirles". El jefe de los ministro presentó ante los senadores el proyecto de ley en revisión que aprueba el Programa de Facilidades Extendidas a efectos de refinanciar la deuda existente con el Fondo Monetario Internacional, correspondiente al acuerdo Stand-by suscripto en el año 2018. Manzur insistió en los riesgos que genera la crisis entre Rusia y Ucrania en los precios y, en particular, en los alimentos. "Suma argumentos de debatir este proyecto", insistió el funcionario.
En la reunión que se realiza desde las 15 en el Salón Azul del Palacio Legislativo participan además el ministro de Economía, Martín Guzmán, el presidente del Banco Central, Miguel Ángel Pesce, y la directora de la AFIP, Mercedes Marcó Del Pont. La iniciativa ya cuenta con media sanción en la Cámara de Diputados, donde obtuvo 202 votos afirmativos, 37 negativos y 13 abstenciones.
"Como argentino estoy realmente muy orgulloso del proceso de análisis, intercambio y debate que tuvo lugar en la Cámara de Diputados, que dio lugar a un respaldo tan ostensible. Es la primera vez en la historia parlamentaria que un proyecto de refinanciación de deuda con el FMI es estudiado y discutido con tanto detalle por nuestras legisladoras y legisladores, para luego recibir un amplio apoyo. Esto realmente es dotar al proyecto de legitimidad democrática y popular", sostuvo Manzur.
El funcionario remarcó que su gobierno "no hubiera recurrido al FMI". "Nuestro espacio político siempre ha caracterizado de modo crítico el acuerdo Stand-By de 2018: nuestra posición siempre estuvo en desacuerdo con a lo obrado por el gobierno anterior como con lo actuado por el FMI. Esto ya lo hemos planteado en reiteradas oportunidades, pero es bueno recordarlo ante los miembros del Honorable Senado de la Nación", se anticipó Manzur al debate de la posición dentro del Frente de Todos.
"Pese a que hubiéramos preferido estar en otra situación, nuestra vocación ahora es resolver el problema con mirada constructiva y de futuro. estamos en una instancia en la que necesitamos dar cierre a esta negociación para evitar la interrupción de los compromisos de la Argentina con el organismo. Reitero: Una mirada crítica sobre el rol del FMI no es razón para alentar el voto en contra en esta particular coyuntura. El acuerdo no es 'a favor' del FMI sino a favor de la Argentina. Estamos en una situación que nos llama a pensar y actuar por fuera de las divisiones políticas y, como dije antes, con responsabilidad y vocación de futuro", sostuvo el funcionario.
"Debemos resolver y estamos resolviendo del mejor modo posible una situación de endeudamiento no deseada pero que objetivamente se interpone entre el presente de nuestro país y los objetivos de desarrollo económico con inclusión social al que aspiramos todos y todas", agregó el jefe de Gabinete.
El funcionario afirmó que el acuerdo con el FMI permitirá cerrar "una etapa difícil de nuestra administración". "El gobierno que encabeza el Presidente Fernández se desenvolvió en un contexto inusualmente difícil. La pandemia se desató a menos de tres meses de iniciada la gestión. A ello se sumaba la deuda con acreedores privados y con el FMI, el deterioro del aparato productivo, el cierre de miles de Pymes, la caída de las exportaciones y el incremento de la desocupación y la pobreza. Todo esto sumado: endeudamiento, crisis económica y social y pandemia volvió altamente problemático alcanzar los objetivos propuestos por nuestro movimiento, explicó Manzur.
"El acuerdo nos fortalece para seguir profundizando el crecimiento con inclusión. El potencial de la Argentina es enorme: este acuerdo nos ayuda a sacar de encima una carga insoportable y desatar las fuerzas productivas", señaló el jefe de los ministros. "Nos da tiempo, nos permite crecer, nos permite estar más fuertes al momento de hacer los pagos y nos facilita la negociación y el acceso a países, regiones y mercados del complejo mundo que vivimos", resaltó Manzur.
El acuerdo Stand-by que firmó el macrismo fue por por una suma de 57 mil millones de dólares, lo que representaba el 1277 por ciento de la cuota de la Argentina ante el FMI. De este monto, se desembolsaron 44.500 millones de dólares, con un programa insostenible de políticas, plazos y montos de repago. Los fondos recibidos se utilizaron principalmente para financiar la formación de activos externos y para cancelar deuda de los acreedores privados en moneda extranjera.
"Esta deuda se combinó con la fuerte devaluación del peso de los años 2018 y 2019, lo que transformó dramáticamente la relación entre deuda y PBI. En efecto, la deuda representaba en 2015 el 52,6 por ciento del PBI; mientras que para fines de 2019 esa relación había trepado al 88,8 por ciento", resaltó el jefe de Gabinete. "Así fue como volvió a la Argentina la dependencia con el FMI, la cual pensábamos superada desde que el presidente Néstor Kirchner cerrara ese capítulo con decisión y mirada estratégica en el 2006, cancelando la totalidad de la deuda que hasta ese momento teníamos con ese organismo", señalo el funcionario.
El sendero de reducción gradual del déficit fiscal sobre la base de una economía que se estima en los anexos del acuerdo se expanda en los próximos años es el siguiente: para el año 2022 se proyecta un déficit fiscal primario de 2,5 por ciento del PBI; para el año 2023, de 1,9 por ciento, mientras que para el 2024, de 0,9 por ciento. De este modo, la consolidación fiscal se alcanzará de manera progresiva a través de un paquete equilibrado de medidas de gastos e ingresos.
Desde la óptica monetaria y financiera, se programa una reducción gradual y persistente de la asistencia monetaria que realiza el Banco Central al Tesoro Nacional. "En el proceso de negociación se logró además acordar un enfoque multicausal para combatir la persistente inflación que nos afecta, en especial a los sectores de menores ingresos. Este entendimiento permite desarrollar una estrategia que ataque los diversos factores de la inflación en forma concurrente, sin limitarnos a una sola dimensión del problema", explicó Manzur.
"Senadoras, senadores: les solicito el tratamiento más urgente posible a este proyecto de Ley de modo que, teniendo en cuenta los vencimientos previstos para el mes de marzo, podamos evitar atrasos que generarían un daño inconmensurable a la recuperación del país. Les pido su apoyo para dejar atrás esta carga y poder concentrarnos en profundizar la recuperación económica de la Argentina", concluyó.