La Unión Europea (UE) defendió hoy al euro como instrumento para que Europa siga siendo soberana en el mundo, a días de cumplirse el 25 aniversario de la entrada de la moneda común.
El euro hoy en una parte indispensable de nuestra vida cotidiana, dándonos simplicidad, estabilidad y soberanía. Hizo la vida más simple para los ciudadanos europeos, quienes pueden fácilmente comparar precios, intercambiar y viajar. Y nos dio estabilidad, protegiendo el crecimiento y el empleo frente a las crisis, señaló la UE.
La misiva lleva las firmas de los presidentes del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, del Eurogrupo, Pascal Donohoe; del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, del Consejo Europeo, Charles Michel; y de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
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En el texto se enfatiza que el euro le otorgó a Europa más soberanía en un mundo turbulento, lo cual llevó a que no sea una sorpresa que la Eurozona haya crecido de 11 a 20 países desde su fundación, siendo en la actualidad el método de pago de 350 millones de personas.
El 1 de enero de 1999 el euro entró en vigencia, aunque, durante sus tres primeros años, no circulaba sino que se utilizaba únicamente a efectos contables, por ejemplo, en pagos electrónicos.
Hubo que esperar al 1 de enero de 2002 para que reemplazara a los billetes y monedas nacionales como el marco alemán, la peseta española, la lira italiana o el franco belga.
Si bien teóricamente el euro es una condición para ingresar a la UE con excepción de Dinamarca tras un referéndum negativo en 2000-, hay países que actualmente no muestran interés en adoptarlo como Polonia, República Checa, Escocia y Hungría.
Los titulares de los organismos europeos reconocieron que durante los años de su historia hubo tremendos desafíos, incluso preguntas sobre el futuro del euro en sí mismo pero que, en cada oportunidad, se encontraron las respuestas correctas.
En respuesta a la crisis financiera global y a la crisis de deuda soberana, por ejemplo, establecimos protecciones como el sistema armonizado de supervisión bancaria. Hoy, el respaldo para el euro está cerca de niveles récord, indicaron.
Entre los desafíos actuales citaron las tensiones geopolíticas, la crisis climática y una mayor competencia de políticas energéticas e industriales de otras partes del mundo, lo cual requiere una respuesta colectiva.
En la medida que el mundo cambia, nuestra acción tiene que probar que una Europa unida provee las respuestas que los europeos y el mundo necesita, concluyó el artículo.
Con información de Télam