La implantación del girasol y del maíz temprano concluyó esta semana en el centro y norte de Santa Fe con una demora de alrededor de un mes, debido a que las lluvias recientes permitieron reanudar las actividades luego de un período sin agua útil en la cama de siembra, informaron hoy voceros del sector.
El informe semanal que elaboran el Ministerio de la Producción provincial y la Bolsa de Comercio de Santa Fe indicó que el área sembrada con girasol fue de 99.450 hectáreas, en tanto con maíz temprano alcanzó las 66.500 hectáreas.
Además, el trabajo señala que continuaron las actividades de siembra de la soja temprana, que hasta el momento cubrió una superficie de 157.500 hectáreas, lo que representa un 15% de lo estimado inicialmente y que supera el millón de hectáreas.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
En cuanto al trigo, las condiciones climáticas impidieron esta semana la continuidad de la cosecha hasta el domingo pasado, luego comenzó el movimiento de cosechadoras donde el suelo lo permitió, ya que en algunos sitios más húmedos quedaron huellas de las maquinarias.
Los productores intentaron agilizar las tareas debido a que los pronósticos anuncian inestabilidad por varios días a partir de la jornada de hoy.
Los rendimientos promedios obtenidos reflejaron el impacto de las lluvias heterogéneas, irregulares o variables que se produjeron durante el ciclo del cereal.
En el área norte, departamentos 9 de Julio, Vera y General Obligado, hubo valores mínimos de entre 7 y 10 quintales por hectárea, máximos que superaron los 25 quintales y lotes puntuales de 40 quintales.
En la región central, departamentos San Cristóbal, San Justo, San Javier y Garay, los mínimos fueron de 8 a 11 quintales, los máximos de entre 23 y 25 quintales y hubo lotes puntuales de hasta 40 quintales por hectárea.
En la misma zona, departamentos Castellanos, Las Colonias y La Capital, los valores mínimos fueron similares, pero los máximos ascendieron hasta entre 35 y 38 quintales, y se registraron lotes puntuales de hasta 50 quintales.
Finalmente, en el área sur, departamentos San Martín y San Jerónimo, hubo rindes mínimos de entre 15 y 18 quintales, máximos que superaron los 35 quintales y lotes puntuales de 52 quintales.
El 40% de los trigales se encontró en estado bueno, con algunas parcelas muy buenas, un 35% regular y un 25 % malo, y las estimaciones de los productores indican que las últimas precipitaciones no modificarían sus condiciones debido a que, en un alto porcentaje, los cultivares se encontraban en estadios finales de desarrollo.
Con información de Télam