La Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, a través del Fondo Fiduciario Nacional para la Agroindustria (Fondagro), invirtió $18,3 millones para impulsar los ensayos de la vacuna contra la Leucosis Bovina que realiza el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) con el objetivo de brindar inmunidad sólida para el ganado bovino y bioseguridad para los productos de origen vacuno.
"El proyecto busca no solo abordar una necesidad en la salud del ganado, sino también consolidar avances científicos que podrían tener implicaciones en la agroindustria, en función de los ejes trazados por el ministro de Economía, Sergio Massa", explicó el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Juan José Bahillo.
Tras advertir que la carencia de vacunas comerciales y tratamientos eficaces ha acentuado la urgencia de encontrar soluciones innovadoras, Bahillo afirmó que a través de los estudios llevados adelante por el INTA se busca aumentar la bioseguridad del ganado argentino.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Los fondos se canalizarán hacia ensayos de la vacuna, desarrollada por equipos del INTA, en una nueva etapa de investigación sobre esta enfermedad de impacto global que ha sido identificada por la Organización Mundial de Salud Animal como una preocupación para el comercio internacional.
El Virus de la Leucosis Bovina es un retrovirus que induce una infección crónica en el ganado bovino, que -una vez infectado- sigue siendo portador de virus de por vida y comienza a mostrar una reacción serológica pocas semanas después, explicó el INTA.
La leucosis es una enfermedad silenciosa con un impacto encubierto con 10% de mortandad de los animales y una reducción en la capacidad reproductiva del rodeo, así como una pérdida de la capacidad productiva.
Casi 100% de los tambos de Argentina tiene un alto nivel de contagio, de 80% o más; y, actualmente, no hay vacuna comercial disponible para la prevención de esta enfermedad ni existe un tratamiento posible.
La propuesta de una vacuna -una cepa atenuada de virus/provirus que impide la infección con la cepa salvaje y en consecuencia impide el desarrollo de la leucosis bovina- apunta a un mercado global de producción, control y prevención de la enfermedad.
Con información de Télam