La inflación interanual en la Eurozona continúa en baja y fue de 2,4% anual este mes, cinco décimas menos que en octubre, según los datos preliminares publicados hoy por el instituto de estadísticas Eurostat, acercándose de esta forma a la meta del 2% interanual del Banco Central Europeo (BCE).
El dato se ubicó por debajo del 2,7% previsto por los economistas.
La variación mensual en los veinte países que utilizan al euro como moneda, en tanto, presentó una deflación del 0,5%.
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Esta baja de la inflación, que hace un año atrás se ubicaba en 10,1% anual, responde en parte a las sucesivas subas de las tasas de interés por parte del BCE.
El organismo monetario, tras realizar diez ajustes al alza consecutivos, dejó sin modificaciones la tasa de referencia el mes pasado en un récord del 4% anual.
Entre los diversos componentes, los alimentos siguen liderando la lista con un índice del 6,9%, muy por encima del promedio general, aunque presentan una baja respecto del 7,4% del mes anterior.
La energía, en tanto, fue la que más aportó a la moderación de la inflación con una baja anual del 11,5%, acentuando el descenso de 11,5% de octubre.
Otra nota positiva fue que la inflación subyacente –que excluye los valores volátiles de la energía y los alimentos- también se moderó y se situó en 3,6% frente al 4,2% de octubre.
En ese sentido, los servicios marcaron un aumento del 4% -respecto del 4,6% de octubre- y los bienes industriales totalizaron 2,9%, contra 3,5% del mes pasado.
Entre los diversos países, las mayores tasas de inflación fueron en Eslovaquia (6,9%), Croacia (5,5%) y Austria (4,9%) mientras que Bélgica con una deflación de 0,7% es la que presenta la menor variación.
En lo que respecta a la inflación de las principales potencias europeas, lidera Francia con 3,8% (0,7 puntos porcentuales menos respecto del mes anterior); y le sigue España con 3,2% (-0,3), Alemania 2,3% (-0,7), e Italia 0,7% (-1,1).
Con estos datos positivos de la inflación, el mercado ahora espera que pronto el BCE comience con los recortes de tasas y apuesta por cuatro reducciones de 25 puntos básicos cada una durante el año próximo.
“Esta inflación más baja de lo esperada, debería asegurarle al BCE que las presiones en los precios están mermando y que no debería subir otra vez las tasas. Incluso podría motivar a las ´palomas´ del consejo gobernante a comenzar a hablar sobre recortes”, comentó la economista Maeva Cousin a la agencia Bloomberg.
Bert Colijn, economista del banco ING, señaló que la trayectoria de la inflación en la eurozona abre las puertas a recortes en las tasas de interés del BCE.
La caída de la inflación "está ocurriendo incluso más rápido de lo que esperábamos, particularmente en el caso de la inflación subyacente", señaló a la agencia AFP.
Yannis Stournaras, titular del banco central griego afirmó que no espera recortes hasta mediados de 2024, mientras que para el presidente del Bundesbank, Joachim Nagel, aún es prematuro para siquiera hablar del tema.
El organismo monetario, además de la desaceleración de los precios, tomará en cuenta la caída de la actividad: en el tercer trimestre, el Producto Bruto Interno (PBI) cayó un 0,1% y, en caso de seguir esta tendencia en el último tramo del año, entrará en una recesión técnica.
“La desinflación está en proceso. Necesitamos evitar daños innecesarios a la actividad económica y riesgos a la estabilidad financiera”, manifestó, en ese sentido, el titular del Banco de Italia, Fabio Panetta.
En un reporte separado, Eurostat informó hoy que el desempleo en la Eurozona permaneció en octubre en 6,5%, un mínimo en toda la serie histórica en el cual permanece desde marzo último, pese a la desaceleración económica.
Con información de Télam
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