La industria química y petroquímica determinó que el dióxido de carbono (CO₂) emitido tuvo una reducción del 24 % como resultado de las operaciones de esa industria en el país, dada principalmente por la mejora de los procesos y los avances tecnológicos, y una disminución del 6% en dióxido de azufre (SO₂) emitido por la mejora en la calidad de los combustibles utilizados.
Así se desprende de la nueva edición, publicada hoy, de los Indicadores de Desempeño de la Industria Química y Petroquímica como parte del Programa de Cuidado Responsable del Medio Ambiente administrado por la Cámara de la Industria Química y Petroquímica (CIQyP), desde 1992.
Los indicadores de desempeño de la Industria Química y Petroquímica son de vital importancia para garantizar la seguridad, la eficiencia y la sostenibilidad de estas actividades.
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Las cifras reportadas por parte de las empresas adheridas al Programa representan más del 75% del volumen de producción y comercialización de la industria local, y refleja la orientación hacia un modelo productivo circular y de baja en emisiones de carbono, alineada con las directrices de las Naciones Unidas.
Durante los últimos años, la mayoría de los indicadores identificados y evaluados han mostrado mejoras significativas. En este sentido, entre los parámetros que arrojó el análisis de los indicadores presentados, entre el período 2020-2021, se destaca que el dióxido de carbono (CO₂) emitido muestra una reducción del 24 %, dada principalmente por la mejora de los procesos y los avances tecnológicos.
Por su parte, se observa una disminución del 6% en dióxido de azufre (SO₂) emitido a la atmósfera por combustión, lo cual se debe a la mejora en la calidad de los combustibles utilizados, por menor consumo de combustibles líquidos.
A su vez, respecto a los gases de efecto invernadero, las emisiones de óxidos de nitrógeno aumentaron en 2021 un 35% respecto a 2020, se asocia al mayor nivel de producción, reemplazo de combustibles líquidos por otros, algunos problemas en calderas y cambios en los sistemas de medición con mayor frecuencia.
El Informe de la CIQyP® también destaca que las inversiones en Control de Ruidos Molestos han aumentado considerablemente un 180% por calibración de equipos, reactivación de obras post-pandemia, monitoreos de ruido ambiente vecinal, y, tal como se menciona en las inversiones de los indicadores anteriores, la depreciación del peso.
En los casos del Nitrógeno al Agua (-8%) y Metales Pesados al Agua (-39%) se observan leves disminuciones producto de mejoras en procesos y cierre de plantas durante algunos periodos en los últimos años.
Respecto a la cantidad de Efluentes Líquidos Vertidos a Cuerpo de Agua Superficial, Colectora Cloacal o Mar caen un 50%, producto de implementación de mejoras en los procesos productivos y cierres de plantas que no cumplían con los estándares.
Con información de Télam