EEUU y China buscan colaborar para evitar defaults en países emergentes

23 de febrero, 2024 | 13.38

Estados Unidos y China comenzaron a entablar conversaciones para definir medidas con el objetivo de evitar una ola de cesaciones de pago de deuda soberana en los países emergentes.

La discusión bilateral apunta a definir medidas para, entre otros puntos, extender los plazos de pago y aliviar la carga anual de deuda, cifrada en casi US$ 400.000 millones en los países pobres, señalaron fuentes al tanto de la cuestión a la agencia Bloomberg.

Del mismo modo se busca una alternativa a las altas tasas de interés que enfrentan estos países al buscar financiamiento en el mercado.

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Otra idea que se baraja es aumentar el financiamiento del Banco Mundial y otros bancos multilaterales.

La idea es avanzar con estas medidas antes de que los países caigan en default y tengan que reestructurar la deuda.

Cualquier acuerdo que alcancen Washington y Beijing deberá ser convalidado por todo el G20, al igual que el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial.

Del mismo modo, se requeriría algún tipo de aprobación de los acreedores privados que progresivamente fueron capturando una mayor proporción del endeudamiento externo de estos países.

El G20 recientemente intentó buscar soluciones a la problemática sin lograr grandes avances, si bien en 2020, en conjunto con el FMI y el Banco Mundial, creó el Marco Común, un programa para reestructuración de deudas.

El marco buscaba reunir en una misma mesa a los prestamistas tradicionales del Club de París -en su mayoría países desarrollados de Occidente- junto a acreedores emergentes como China y el sector privado.

Pero el esquema fue cuestionado por avanzar demasiado lentamente, dejando a los países en default por años y desincentivando a recurrir al mismo a aquellos al borde de la cesación de pagos.

Un ejemplo es Zambia que permanece en default desde 2020 por conflictos entre las partes acreedoras a la hora de reestructurar la deuda.

Otra problemática son las tasas de interés: Kenia tuvo que refinanciar bonos en dólares este mes con un cupón de 10,37%.

“Hablamos frecuentemente con China sobre preocupaciones sobre la deuda soberana y hablamos con muchos países sobre cómo asegurarnos de que la arquitectura financiera internacional satisfaga las necesidades de financiamiento de los países de bajos ingresos”, indicó en un comunicado el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, sin dar mayores precisiones sobre las discusiones en curso.

Por su parte, la vocera del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Mao Ning, indicó que su nación "concede gran importancia a las cuestiones de la deuda de los países en desarrollo".

Estados Unidos y China discuten el tema “a través de canales multilaterales y bilaterales”, agregó hoy en una conferencia de prensa en Beijing.

El diálogo entre ambos países es clave porque mientras Washington ejerce un profundo dominio sobre la arquitectura financiera global en el FMI y el Banco Mundial, China es el mayor acreedor de los países en desarrollo.

Las conversaciones entre ambos países comenzaron antes de una reunión en California en noviembre entre los presidentes Joe Biden y Xi Jinping; y continuaron este año, según señalaron las fuentes.

El Banco Mundial informó que los países en desarrollo tuvieron que pagar una cifra récord de US$ 443.000 millones en concepto de servicio de deuda en 2022.

En ese marco, advirtió que la situación puede llevar a estos países a una crisis, creando una “década perdida” de estancamiento económico.

Cerca de una docena de países en desarrollo están en default o cuentan con bonos cotizando a niveles que sugieren que el mercado se está preparando para un default, según datos compilados por Bloomberg.

Con información de Télam