Guillermo Milano, entrenador del seleccionado argentino de handball masculino que mañana aspira a alcanzar el objetivo de clasificar al Mundial 2023 de la disciplina, apuntó en torno a la abultada victoria del debut ante Bolivia (70-8) que la "única manera de respetar al rival es jugar con intensidad".
Los Gladiadores abrieron su participación en el torneo Centro Sur de la especialidad, con sede en Recife, con un abultado y lógico triunfo.
Y mañana, desde las 18.00, el combinado "albiceleste" podrá acceder a uno de los cuatro cupos mundialistas, en caso de superar a Uruguay, en el estadio Geraldao Magalhaes (trasmisión de DeporTV).
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Argentina diseñó una holgada diferencia de 62 tantos en su estreno en el campeonato continental, aunque quedó algo lejos del histórico 82-7 logrado dos años atrás en Maringá, en la edición 2020 de este mismo torneo.
"En aquella ocasión necesitábamos el triunfo lo más holgado posible, porque la diferencia de gol servía ante un eventual empate porque se trataba de un torneo todos contra todos", explicó el entrenador de Los Gladiadores
"Este formato es diferente. Tratamos de asumir el compromiso con seriedad y así lo hicimos. La manera de respetar a un rival es jugar al 100 por ciento, con intensidad", expreso Milano, en charla con Télam.
Dos años atrás, el técnico bonaerense se desempeñaba como el principal colaborador del DT principal, el español Manolo Cadenas.
"Les comenté a los muchachos que el objetivo era correr y actuar con seriedad. Y, fundamentalmente, que nadie tuviera que terminar con alguna lesión", completó el DT.
"Desde lo táctico no podemos hacer un análisis de un partido de esas características, porque era provocar la pérdida, recuperar la pelota y dar dos o tres pases para llegar al arco rival. No pudimos trabajar ninguna acción planificada", comentó Milano.
Con información de Télam
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