El clásico entre la Universidad de Chile y la Católica se suspendió hoy sobre la media hora del primer tiempo a raíz de una lluvia de bengalas lanzadas al campo de juego por los hinchas del primero, que puso en serie riesgo la integridad física de los futbolistas.
El encuentro correspondiente a la duodécima fecha del campeonato chileno que encabeza Huachipato estaba igualado 0 a 0 entre la "U", dirigida por el argentino Mauricio Pellegrino, y la Católica que conduce su compatriota Ariel Holan, en Concepción, cuando fue suspendido por el árbitro Francisco Gilabert..
El clima estaba caldeado desde el comienzo del cotejo especialmente donde se agruparon los hinchas de la Universidad de Chile, que comenzaron desde las plateas que están detrás de los bancos de suplentes y con los rostros tapados a arrojar bengalas encendidas al terreno de juego.
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El clásico Universitario se suspendió por culpa de unos delincuentes que se confabularon para que este partido no se juegue. Agredieron a nuestros propios hinchas y miembros del plantel, informaron desde la cuenta oficial de la U de Chile.
Mientras que el presidente de la Universidad Católica, Juan Tagle Quiroz, exigió más presencia de carabineros en los estadios y sostuvo que los "clubes tienen que enfrentar unidos este tema. No pretendo ganar los puntos, pero quiero que el partido se termine. No debemos entregar herramientas de quita de puntos por delincuencia a clubes que no tienen herramientas para enfrentarla. Le imploro al Gobierno y Carabineros que nos sentemos y tomemos las medidas concretas, pidió.
En los otros dos partidos que sí se jugaron este domingo hubo empate 1 a 1 entre O'Higgins y Unión Española, mientras que Deportivo Copiapó venció como local a Coquimbo Unido por 1 a 0, con gol del delantero argentinos Maximiliano Quinteros, nacido en Avellaneda hace 34 años, surgido en Racing Club y con pasos por Sacachispas y Los Andes.
Con información de Télam