Las yeguas Obia Star y Super Shine empataron hoy el primer puesto en el Clásico General Luís María Campos, una prueba de 1.600 metros de arena húmeda con un premio de 1.800.000 pesos que se corrió en el séptimo turno de la reunión en el hipódromo Argentino de Palermo.
Obia Star fue corrida por el jockey Maximiliano Aserito y Super Shine fue conducida por el jinete Kevin Banegas. El tiempo de la carrera fue de 1m 35s 39/100 para la milla y el dividendo fue de 2,65 por boleto para Obia Star y de 4,10 por boleto para Super Shine.
Se puede decir que Super Shine ganó de punta a punta porque agarró el comando a los 50 metros de haber largado. A partir de ahí fue seguida por Kiev Princess, Obia Star y Punta Turquesa. Así fueron dando la vuelta hasta ir entrando a la recta final.
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Ya en los 600 metros finales Super Shine por media cancha siguió mandando las acciones de la carrera. Por el lado de adentro se metió Dona Morebi y desde atrás atropelló Obia Star.
Faltando 250 metros Super Shine mantuvo la punta con firmeza, mientras que Dona Morebi lo hizo fuerte por el lado de los palos y Obia Star apareció con fuerza desde atrás.
En los 50 metros finales Super Shine tenía la carrera ganada pero llegó la gran atropellada de Obia Star y la de Dona Morebi . En el disco Obia Star entró en una misma línea con la puntera Super Shine. Un poquito más atrás lo hizo Dona Morebi.
Hubo bandera verde por parte del Comisariato para ver la carrera. Luego de unos cinco minutos dieron empate en el primer puesto entre Obia Star y Super Shine. Segunda a solo medio cuerpo entró Dona Morebi.
Los parciales fueron de 1m 09s 77/100 para los 400 metros y de 1m 09s 77/100 para los 1.200 metros. El parcial de los 800 metros no fue registrado por el hipódromo.
Obia Star alcanzó hoy su primera victoria oficial sobre nueve carreras y Super Shine logró su segundo triunfo oficial sobre tres carreras.
Hubo emoción por todos lados. El final fue medio de película norteamericana. Hubo dos yeguas que empataron y cruzaron el disco muy juntas y una tercera que se quedó atrás por solo medio cuerpo. Adrenalina por todos los rincones de Palermo. El final se robó la película.
Con información de Télam
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