Una reconocida leyenda del vóley murió a los 71 años luego de luchar por su vida durante varios días. El pasado lunes 25 de diciembre sufrió un paro cardíaco producto de un ACV (accidente cerebrovascular) y estuvo casi una semana internado. El viernes 29 por la mañana se dio su triste deceso, el cual sin dudas significó una durísima noticia para los fanáticos del deporte. Las entidades que representó a lo largo de su carrera lo despidieron en las redes.
Se trata de Enrique Edelstein, mejor conocido como "Quique", quien fue sumamente reconocido por su trabajo en las selecciones de base y en River Plate. Con su amor a la disciplina con la que creció con el paso de los años, forjó una manera de trabajar que la mantuvo a lo largo del tiempo. Por este motivo, tanto la Federación de Vóleibol Argentino, la Metropolitana y la ACLAV (Asociación de Clubes Liga Argentina de Voleibol) lamentaron la pérdida del exentrenador.
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"¡Hasta siempre, Quique! La FeVA lamenta profundamente el fallecimiento de Quique Edelstein, docente, entrenador, periodista y quien era parte de nuestros seleccionados en este último tiempo. ¡Gracias por todo llo que nos dejaste! Nuestras condolencias a su familia y amigos", escribieron desde las redes sociales de la Federación de Vóleibol Argentino. Quien también lo despidió fue Racing Club, con otro sentido mensaje.
"Lamentamos comunicar el fallecimiento de Pancho Vera, histórico director de la Revista Racing y de Enrique Edelstein, exjugador y entrenador de vóley de reconocida trayectoria nacional e internacional, periodista y apasionado por nuestro club", publicaron desde la cuenta de X (ex-Twitter) de la "Academia" debido al fanatismo de "Quique" por el elenco de Avellaneda.
Boxeo de luto: murió una importante figura argentina y llora el deporte de los puños
El boxeo argentino está de luto tras la muerte de un referente de dicho deporte a los 82 años. Con el paso del tiempo se ganó un lugar grande a nivel nacional y no por su desempeño en el cuadrilátero ya que no fue boxeador profesional a lo largo de su carrera. Al igual que otros dirigentes de dicha disciplina, estuvo abajo y cerca del ring, siendo parte importante en grandes peleas tanto a nivel nacional como también internacional. Por este motivo, su pérdida fue sin dudas un golpe terrible para el pugilismo local.
El hombre en cuestión es nada más y nada menos que Jorge Molina, exdirectivo de la Federación Argentina de Box y de otras entidades del deporte. Con el paso de los años se desempeñó como tesorero, secretario y líder máximo de la Comisión de Boxeo Profesional hasta que, tras la muerte de Luis Romio y Osvaldo Bisbal -autoridades de la FAB- se hizo cargo de la presidencia. Claro que, en este caso fue de manera interina ya que el cargo quedó vacante hasta las posteriores elecciones hasta la asunción de Luis Doffi.