La fiesta no pudo ser completa para Gales. Luego de vencer a Ucrania 1-0 y clasificar al Mundial de Qatar 2022 a través del repechaje, el seleccionado europeo no tendrá a su máximo ídolo al frente del plantel en la cita mundialista. Ryan Giggs, quien supo ser estrella de su país, decidió renunciar a su cargo de entrenador por una denuncia en su contra de violencia de género realizada por su expareja. El exvolante ya había sido apartado del puesto de manera momentánea en 2020 hasta que se definiera el caso.
“Ha sido un honor y un privilegio dirigir a mi país, pero creo que lo correcto es que Gales se prepare para el Mundial con seguridad y sin especulaciones respecto a la posición de su entrenador”, se expresó en un comunicado el exjugador británico. A finales de 2020, Giggs había sido arrestado por agredir a dos mujeres, su expareja y la hermana, por comportamiento coercitivo entre 2017 y 2020.
Rob Page quedó como DT del equipo desde la salida del exvolante del Manchester United y fue quien clasificó a Gales al Mundial luego de 64 años, tras su última participación en Suecia 1958. La idea inicial, tanto de la dirigencia galesa como la del entrenador, era esperar el veredicto del juicio, que iba a comenzar en enero de 2022 pero se demoró hasta mediados del mismo año. Al no avanzar la causa y a falta de cinco meses para el inico de Qatar, decidieron terminar el vínculo.
“No fue culpa de nadie que el proceso se retrasara. No quiero que la preparación de la selección de mi país para la Copa del Mundo se vea afectada o desestabilizada por el continuo interés en mi caso”, confesó Giggs, quien había llegado a la dirección técnica de "Los Dragones" en 2018.
“Tal y como se ha publicado, me he declarado inocente de las acusaciones criminales a las que he hecho frente en la corte de Manchester. Pese a que tengo confianza en el proceso judicial, me hubiera gustado que el caso se hubiera cerrado antes, para poder seguir con mis responsabilidades como entrenador”, sentenció.
Giggs está bajo investigación y control judicial tras ser acusado de violencia contra su ex pareja, a la que habría "denigrado, humillado, maltratado e, incluso, aislado contra su voluntad, durante tres años, de diciembre 2017 a noviembre 2020", como figura en la causa. Además, también habría agredido y golpeado a la hermana de su ex-novia, que inició otra denuncia paralela a la anterior. Se prevee que en agosto de 2022 comenzará el juicio en Manchester, Inglaterra.