Juegos Olímpicos Tokio 2020: la ceremonia inaugural teñida por un caso de abuso y acoso

19 de julio, 2021 | 11.22

El músico japonés Keigo Oyamada renunció como compositor para la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos Tokio 2020 después tras resurgir viejos informes sobre episodios de acoso y comportamiento abusivo, días antes de que comiencen de forma oficial unos juegos golpeados por la pandemia.

Oyamada, a quien se le encomendó la tarea de componer la música para la ceremonia programada para el 23 de julio, fue objeto de críticas en las últimas semanas después de que empezaron a circular por Internet números antiguos de revistas.

En una entrevista con la revista Quick Japan publicada en 1995, Oyamada contó cómo encerró a un compañero de clase en una caja de cartón y se burló de un estudiante con discapacidades, informó el diario Asahi Shimbun la semana pasada. También describió cómo acosó a un compañero de clase en otra revista publicada a mediados de los 90, dijo el periódico.

Algunas versiones de las entrevistas en los medios contienen referencias a tratos degradantes y abusivos por parte de Oyamada, obligando a otro niño o niños a comer heces o masturbarse. Reuters no pudo verificar de forma independiente las entrevistas, aunque las fotos de las páginas circularon ampliamente en las redes sociales.

"En cuanto a mi participación en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio 2020, siento profundamente que aceptar la solicitud fue una falta de consideración para varias personas", dijo Oyamada en Twitter. "Hice arreglos con las partes relevantes y presenté mi renuncia al comité organizador".

Su anuncio se produjo pocas horas después de que los organizadores de Tokio 2020 dijeran que querían que Oyamada se quedara para prepararse para la ceremonia.

En un comunicado en su página web el viernes, Oyamada -también conocido como Cornelius- dijo que sentía un profundo remordimiento y responsabilidad.

"Ofrezco mis más sinceras disculpas (...) En mis días escolares y en el momento de las entrevistas (de la revista), era un hombre muy inmaduro que no podía imaginar cómo se sentían las víctimas", dijo en el comunicado.