Rafael Nadal no mostró signos de dolor cuando el 13 veces campeón del Abierto de Francia pasó a la segunda ronda de Roland Garros con una demolición total por 6-2 6-2 6-2 del australiano Jordan Thompson el lunes.
El español, que nunca había llegado a París tan poco preparado como este año, después de que una lesión en las costillas y un problema crónico en el pie obstaculizaran la preparación de su amado torneo de Grand Slam, no se sintió molesto en ningún momento en la fría pista Philippe Chatrier.
"Es increíble volver a jugar en la Philippe Chatrier otra vez. Partido siempre especial en la primera ronda y contento por haber pasado en tres sets", dijo Nadal.
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El tenista de 35 años, que cuenta con un récord de 21 títulos de Grand Slam masculino, restó importancia a las posibilidades de aumentar su cuenta, pero su exhibición recordó a la de años anteriores.
El quinto cabeza de serie buscó terminar algunos puntos rápidamente y cometió varios errores inusuales, pero fueron de poca importancia, ya que pasó el primer set sin problemas.
Nadal rompió el servicio a su rival en el primer juego del segundo set y de nuevo en el quinto y el séptimo cuando empezó a jugar con más pulcritud, haciéndose con un servicio ganador.
Thompson, que recuperó un quiebre, parecía completamente agotado para entonces, pero logró mantenerse firme hasta el 2-2, cuando Nadal efectuó una volea de derecha y ganó todos los juegos restantes.
Con información de Reuters
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