Diego "Peque" Schwartzman encendió las alarmas en el ambiente del tenis argentino con declaraciones muy fuertes en la televisión. El porteño de 31 años se refirió a la crisis que vive en el circuito de la ATP, en el que acumula casi dos temporadas consecutivas con resultados negativos en la elite.
El exintegrante del equipo nacional de la Copa Davis visitó los estudios del programa Generación F en ESPN y allí habló del peor momento de su trayectoria profesional. Incluso, no aseguró su presencia en la qualy de Roland Garros y hasta sembró dudas acerca del futuro inmediato en esta actividad.
El Peque Schwartzman contó su calvario en ESPN: "No sé si voy a Roland Garros"
Una de las figuras de la última década del tenis argentino cayó al puesto número 122 del ranking de la ATP, el peor para él en mucho tiempo. Tras la derrota en la primera ronda del Masters 1000 de Miami (Estados Unidos) frente al ruso Roman Safiulin, el deportista albiceleste realizó un balance de los últimos meses en el circuito: "Me costó ir a jugar la qualy de Australia. Verme ahí después de muchos años me fundió un poco. Tuve una semana de entrenamiento y competencia malísima. Arrancar el año así fue duro. Después renovás energías jugando los torneos en Argentina, pero jugué mal. Cuando jugás mal es difícil ganar".
Luego del traspié en el primer Grand Slam del año sobre la carpeta sintética, el porteño sorprendió a todos y puso en duda su participación en el segundo: el Abierto de Francia en París, sobre el polvo de ladrillo. "No sé si voy a ir a Roland Garros. Con la experiencia de Australia, si la voy a pasar mal, ¿para qué voy a ir?. "Prefiero armar el calendario para intentar entrar a Wimbledon. Si no, jugaría qualy en Wimbledon y Roland Garros", se sinceró acerca del Major francés y del inglés, que serán a mitad de año.
Instalado en la colocación 122 del escalafón mundial, Schwartzman aseveró que con el ranking que tiene "es una incertidumbre" los torneos que jugará y amplió: "Espero alguna invitación o jugar los torneos que más me gustan". "Estoy en la disyuntiva de rearmar el calendario. Se resuelve en el momento y es difícil", puntualizó.
Como no puede dar su mejor versión todavía en lo que va del 2024, el argentino añadió que cuando no logra "competir bien y cuando se repite muchas veces, cuesta el día a día". "El esfuerzo que hago afuera de la cancha es grande. No soy un loco que tiene ganas de jugar hasta el último día que pueda levantar las piernas", describió.
Asimismo, el "Peque" expresó: "Me gusta lo que hago, pero para mi es un trabajo y me gusta hacerlo bien. Si llevo mucho tiempo haciéndolo mal, prefiero divertirme de otra manera". Sobre las derrotas en fila que le generaron la falta de confianza actual, el tenista completó: "No había tenido la experiencia de tener rachas malas, entonces no sabía cómo resolverlas. La experiencia te lleva después a saber cómo resolver y qué cosas te hacen bien. El año pasado di un salto para atrás muy grande".
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