El tenista serbio Novak Djokovic tuvo una actuación impresionante el sábado al derrotar al estadounidense Frances Tiafoe en su primer partido desde que ganó Wimbledon en julio, y luego se asoció con Matteo Berrettini para poner al Equipo de Europa al mando en la Laver Cup.
Con Roger Federer observando desde la pista, en un O2 Arena con las entradas agotadas el día después de su emotivo partido de despedida junto a Rafa Nadal, Djokovic regresó a la acción de forma fascinante.
Tiafoe, semifinalista del Abierto de Estados Unidos, se vio impotente para detener el ataque de Djokovic y el serbio se impuso por 6-1 y 6-3 para poner al equipo europeo de Björn Borg con una ventaja de 6-4 en el marcador.
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Luego se unió a Berrettini, el hombre al que venció en la final de Wimbledon 2020, para vencer al dúo del Equipo del Resto del Mundo, Jack Sock y Alex De Minaur, por 7-5 y 6-2, para dar al Equipo Europa una ventaja de 8-4 de cara a los últimos cuatro partidos del domingo.
Los partidos individuales valían un punto el viernes, dos el sábado y tres el domingo. Se necesitan trece puntos para ganar el trofeo.
Tras el memorable partido final de Federer la noche anterior, la segunda jornada podría haber sido un anticlímax, pero la calidad del tenis y la presencia del gran suizo en el banquillo aseguraron un magnífico espectáculo.
Berrettini, quien sustituyó al suizo 20 veces campeón de un Grand Slam en los individuales, ganó un duro duelo contra el canadiense Felix Auger-Aliassime por 7-6(11), 4-6 y 10-7.
Pero el estadounidense Taylor Fritz empató al Resto del Mundo 4-4 en el segundo partido del día con una ajustada victoria contra el británico Cameron Norrie, sustituto de Nadal que abandonó el torneo por motivos personales.
Fritz ganó 6-1, 4-6 y 10-8 y el Equipo del Resto del Mundo de John McEnroe demostró que está hecho de un material más fuerte este año después de haber sido derrotado 14-1 el año pasado en Boston.
Federer, que observó cada bola junto con el resto de sus colegas del Equipo Europa, incluido Andy Murray, hizo todo lo posible por levantar a Norrie con algunas palabras de sabiduría.
En un momento dado, Federer sugirió al número ocho del mundo que sirviera y voleara, lo que Norrie hizo rápidamente, pero perdió el punto cuando Fritz le envió un globo por encima de su cabeza.
"Si Roger Federer te dice que hagas algo, no hay ninguna posibilidad de que no lo haga, sobre todo jugando para el equipo de Europa", dijo Norrie más tarde.
La decisión de Djokovic de no vacunarse contra el COVID-19 le impidió jugar en el Abierto de Estados Unidos, y el joven español Carlos Alcaraz aprovechó para ganar el torneo y hacerse con el nuevo número uno del mundo.
Pero Djokovic hizo una declaración de intenciones al retomar el camino que dejó al vencer a Nick Kyrgios en la Pista Central de Wimbledon para alcanzar su título 21 de Grand Slam.
Ni siquiera Federer podría haber mejorado un primer set en el que Djokovic no perdió ningún punto con el servicio y lanzó sus precisos golpes de fondo cerca de las líneas con implacable regularidad.
Tiafoe se vio en desventaja al principio del segundo set, pero ganó algo de tracción para volver a presionar con fuerza y tuvo un punto de quiebre que Djokovic repelió de forma magistral.
Djokovic lo resolvió en poco más de una hora.
"No he jugado durante unos meses, así que estoy contento de continuar con la racha, ha sido un partido bastante decente por mi parte, tengo que decir", comentó Djokovic en la pista.
A continuación, Djokovic rindió homenaje a la emotiva final de Federer de la noche anterior. "Fue uno de los momentos más bonitos que hemos vivido en directo o en las pistas de tenis. A todos nos ha dejado boquiabiertos", dijo Djokovic.
Con información de Reuters
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