Dos hermanos argentinos que estuvieron en el Estadio Lusail observando la final entre la Selección Argentina y Francia por el Mundial de Qatar 2022 llegaron al país con la pelota histórica del partido y detallaron la "viveza" con la que actuaron para poder adueñarse de ella luego de que caiga en manos de un francés.
Juan e Ignacio son dos hermanos fanáticos del seleccionado argentino y no dudaron en viajar a Qatar 2022 para seguir al equipo conducido por Lionel Scaloni. Ya en el partido definitorio, vivieron una situación que jamás se imaginaron y regresaron al país con el mismo balón que Lionel Messi marcó en el tercer gol de la final, no sin antes sudar para lograrlo.
La historia de cómo consiguieron tener la pelota de la final del Mundial de Qatar
Cuatro días después de la final de la Copa del Mundo, ambos hermanos dialogaron con Telefé y detallaron cómo obtuvieron el objeto preciado tras ser pateado por Paulo Dybala. "“Cuando vi que la pelota cayó cerca nuestro y la agarró un francés, me acerqué para explicarle que tenía que devolvérsela a la Policía. Fueron segundos tensos porque él se estaba sacando fotos, pero finalmente me la dio. Ahí me la quedé y no la solté nunca más”, comentó Ignacio.
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Pero no terminó ahí, porque luego de "convencer" al hincha francés, agentes de seguridad se acercaron a ellos para que devolvieran la pelota al campo de juego, algo que claramente no ocurrió. "Obvio que después vino un policía, pero le dije que no se la iba a dar, yo no pensaba soltarla. Ahí llegó un supervisor y dijo que me la podía quedar”.
Apenas lograron zafar de la Policía, Juan salió disparado hacia otro sector de la tribuna para que dejaran de identificarlo como el que se había hecho con el balón, como lo detalla: "Me escabullí entre la gente para pasar la euforia de todos los que se acercaban a ver la pelota, incluso Marley estaba ahí y me pidió tocarla”. Ya a la salida del estadio, cuando pensaban que la tensión había terminado, vivieron otra situación insólita. " “Nos hicimos muy amigos de unos jeques a los que les habíamos conseguido entradas y un qatarí nos ofreció alrededor de 21 mil dólares, pero no la vamos a vender”, expresó Juan.
En las horas previas al regreso al país, ambos planearon cómo hacer para que la pelota no sufriera ningún daño. "La pelota no la despachamos en las valijas, que se quedaron en Etiopía. Sabíamos que podía pasar eso, entonces dije que se venía conmigo. El riesgo era muy alto, por eso la pelota viajó conmigo todo el tiempo”, expresó Ignacio. Y luego reconoció: "“Solo se la daríamos a Messi si nos la pide. Si no la quiere, nosotros necesitamos que la firme”.
Según comentaron Ignacio y Juan, la pelota está en proceso de certificación ya que que el abogado de ambos "está en diálogo con un escribano y suponen que esta documentación estará pronto, cuando puedan corroborar el chip del VAR que lleva dentro". El GPS detalla que, en este instante, la pelota de la final del Mundial de Qatar 2022 se encuentra en Argentina.